Los gigantes del capital privado, como Apollo y Blackstone, están invirtiendo en compañías productoras de Hollywood con la intención de beneficiarse de los 115 mil millones de dólares (mdd) anuales, que los servicios estadunidenses de streaming invierten en nuevos programas de televisión y películas.
Estos inversionistas apuestan por que la feroz demanda de nuevas series de televisión se mantendrá durante muchos años. “El streaming sigue creciendo e impulsa una increíble demanda de contenidos con guiones de primera calidad”, dijo David Sambur, codirector de Apollo.
Apollo compró una participación de 760 mdd en Legendary, el estudio cinematográfico que está detrás de Duna (Dune) y Godzilla, mientras que Blackstone se comprometió a invertir más de 2 mil mdd en la creación de una nueva compañía de producción dirigida por antiguos ejecutivos de Disney.
El capital privado entró en el juego al mismo tiempo en el que los inversionistas analizan la sostenibilidad del streaming como modelo de negocio. Netflix, Disney, WarnerMedia y otros gastan cantidades de dinero sin precedentes para alimentar sus servicios.
La mayoría de ellos están perdiendo dinero porque el negocio es muy costoso. Pero su pérdida es la ganancia de cualquiera que ofrezca contenidos para esas plataformas. Nunca ha habido más dinero disponible para financiar nuevos programas, mencionaron los ejecutivos del sector de entretenimiento.
Tanto Apollo como Blackstone están invirtiendo grandes cantidades en compañías que pueden funcionar como “comerciantes de armas” para los streamers, canalizando contenidos para satisfacer su demanda.
Los ejecutivos de Blackstone creen que, al crear una startup de producción independiente en un mercado dominado por los grandes conglomerados, pueden actuar con mayor agilidad. “La forma en que se producen, distribuyen y consumen los contenidos ha cambiado radicalmente”, dijo Joe Baratta, director de Blackstone.
La compañía, llamada Candle, compró el año pasado la productora de Reese Witherspoon, Hello Sunshine, en una operación valorada en 900 mdd. La operación llamó la atención de los ejecutivos de Hollywood por su valoración, que fue alrededor de siete veces los ingresos de Hello Sunshine en 2020, de apenas 65 mdd.
“Todos estos negocios tienen poco capital y generan efectivo”, dijo Baratta, quien añadió que Candle ya está obteniendo “altos rendimientos” y seguirá buscando adquisiciones. “Es como si fuera el mejor negocio de asesoría de fusiones y adquisiciones. Funciona aprovechando las personas, la credibilidad, la reputación y el talento”.
Blackstone, que está construyendo Candle para que con el tiempo cotice en los mercados públicos o se venda a una compañía de medios más grande, también invirtió miles de millones de dólares en escenarios de filmación dentro de su negocio inmobiliario, otra maniobra de la compañía para aprovechar el frenesí de la producción.
“En los próximos años, todo se va a reestructurar en términos de quién queda en pie”, dijo un veterano ejecutivo de Hollywood.
srgs