El nuevo director ejecutivo de Intel, Bob Swan, prometió que van a prestar más atención a las operaciones de la empresa y a agudizar el enfoque de inversión del fabricante estadunidense de chips, al momento de emitir una sólida defensa de las costosas apuestas de la compañía que pusieron nerviosos a los inversionistas.
“Tenemos grandes ambiciones, para capitalizarlas tenemos que ejecutar más rápido y de mejor manera”, destacó Swan en sus primeros comentarios públicos desde que asumió el mando de Intel a principios de este mes. Swan dijo que la compañía será “extremadamente disciplinada” en el futuro.
Agregó que Intel mantendrá sus apuestas estratégicas más importantes, mientras al mismo tiempo cierra o divide operaciones menos relevantes. Señaló como ejemplos la venta de una participación mayoritaria de Intel en el negocio de seguridad hace tres años y el cierre de su empresa en los dispositivos “wearables” (accesorios), pero no mencionó que alguna de las nuevas áreas esté bajo revisión.
Al mismo tiempo, Swan se mantuvo firme en las grandes inversiones que llevó a cabo Intel recientemente, y defendió la fiebre de gastos de la compañía que llegó a frustrar a muchos inversionistas.
“Si queremos jugar en un mercado mucho más grande, vamos a continuar invirtiendo más en investigación y desarrollo, no hay duda de eso”, afirmó. “No queremos ser demasiado cuidadosos en cosas pequeñas o extravagantes como para no invertir en el futuro”.
Los esfuerzos de Intel para moverse rápido más allá de su negocio principal de fabricar procesadores para computadoras personales y servidores provocó un aumento en el gasto. Realizó fuertes gastos en los chips de memorias, GPU y módems para dispositivos móviles, además pagó más de 30 mil millones de dólares (mdd) en las dos mayores adquisiciones de su historia.
Dicho gasto pesó en sus finanzas. La investigación y desarrollo y el gasto de capital dio un salto de 12 mil mdd al comenzar la década, lo que implica 27 por ciento de sus ingresos, y pasó a 29 mil millones de dólares, o 40 por ciento de sus ingresos, el año pasado.
La compañía, conocida por su sólida cultura de ingeniería, provocó cuestionamientos por parte de muchos inversores cuando se nombró a un ejecutivo financiero para ocupar el cargo de director ejecutivo por primera vez en sus 50 años de historia. Un ex director financiero de eBay, Swan se cambió a Intel para ocupar el mismo puesto en 2016.
Sin embargo, las esperanzas de que con él habrá una mayor disciplina con las inversiones de la compañía también generaron apoyo en algunos rincones y llevaron a Joseph Moore, analista de Morgan Stanley, a elevar el viernes la calificación que le da a la compañía, lo que hizo que sus acciones registraran un alza de más de 2 por ciento.
Swan, quien habló a finales de la semana pasada ante un pequeño grupo de reporteros en Silicon Valley, aceptó que los inversionistas tenían “ansiedad” con respecto a los intentos de la compañía de competir con Qualcomm en la tecnología inalámbrica. “Nos estuvimos poniendo al día durante un tiempo, en sus mentes ponerse al día es no ganar dinero”, dijo.
Pero Intel apuesta que la adopción de los nuevos estándares 5G abrirá un gran mercado para sus chips que va más allá de los módems inalámbricos. Swan predijo que conducirá a un aumento en la demanda de la potencia de procesamiento y almacenamiento de datos que convertirá a “the edge” (el límite) -un término que se utiliza para referirse a muchos dispositivos inteligentes conectados- en una plataforma de computación que compita con la “nube” centralizada, lo que alimentó gran parte del reciente crecimiento de Intel.
El jefe de Intel también defendió la polémica apuesta de la compañía en los chips de memoria, donde la falta de escala en relación con los líderes de la industria y la naturaleza altamente cíclica del mercado provocó angustia en algunos inversionistas.
El aumento de las tareas informáticas con un uso intensivo de datos, como el aprendizaje automático, creó la necesidad de acercar la memoria de la computadora a los procesadores, dijo. También agregó que la fortaleza tradicional de Intel en la tecnología de proceso -los métodos para fabricar chips, en lugar de los diseños de los mismos productos- le dará una ventaja en los chips de memoria y evitará que la arrastren a las partes más sensibles del precio y más estandarizadas del mercado.
Bajo la gestión de Brian Krzanich, quien se vio obligado a dejar su cargo como director ejecutivo el verano pasado después de admitir una relación con una empleada de Intel, la compañía trató de hacer de su liderazgo en tecnología de procesos la parte central de su estrategia, pero no logró desarrollar un negocio importante en la fabricación de chips para otras empresas, y tuvo un fuerte tropezón en su transición a los chips de 10 nanómetros.
Swan dijo que la primera parte de la estrategia de memoria de Intel —usando su tecnología superior para producir los chips 3D NAND— ha generado utilidades durante una “par de años”, que estas se invirtieron en sus esfuerzos para crear un módulo de memoria súper rápido conocido como Optane, pero no indicó cuándo va a dar frutos esa inversión.
¿Final con Mac?
Entre las páginas especializadas se especula que Apple cambiará los procesadores Intel por ARM en sus Mac hacia 2020, en un duro golpe hacia la firma de chips.
Sin 5G
Los módems 5G estarán disponibles hasta 2020, confirmó la compañía. Esto afectará directamente la producción de teléfonos iPhone con la nueva red inalámbrica.
En Israel...
El gigante estadunidense invertirá 10 mil mdd en una nueva planta en Israel, según Jerusalén; en paralelo seguirá desarrollando la planta ya instalada.
Empleo
El año pasado, Intel ya había decidido invertir más de 4 mil 300 millones de dólares para mejorar su planta en la localidad de Kiryat Gat; en el país emplea actualmente a 11 mil 700 personas.
Inversión
La empresa de Silicon Valley además tiene mil 170 empleados de Mobileye, una compañía que compró en 2017.