Adam Neumann, el fundador de WeWork, vendió acciones y tomó préstamos contra su participación accionaria en la multimillonaria compañía de bienes, con lo que recaudó al menos 700 millones de dólares (mdd) para sí mismo en los últimos años a medida que el grupo avanza hacia una oferta pública inicial, de acuerdo con personas con información del asunto.
La noticia de las ventas se produce después de que los primeros inversionistas en la compañía —entre ellos Fidelity— vendieron acciones y redujeron el precio al que valoran sus participaciones en WeWork, que recibió un precio de lista de 47 mil mdd después de una inversión de SoftBank, el grupo japonés de tecnología y telecomunicaciones, en enero.
El tamaño de la participación de Neumann en el proveedor de espacio de oficinas compartido después de las ventas de las acciones no se pudo determinar, pero a finales de 2017 tenía una participación mayoritaria con derecho a voto de WeWork, de acuerdo con un folleto para la venta de bonos de la compañía en 2018.
El Wall Street Journal fue el primero en informar sobre la venta de acciones, la cual podría provocar preguntas de posibles inversionistas en la salida a bolsa de WeWork que se tiene prevista y que se espera que ocurra para finales de este año o principios de 2020, de acuerdo con personas con conocimiento del asunto.
En mayo, la compañía buscó resolver un conflicto antes de salir a bolsa al acordar establecer una filial que compraría las participaciones de Neumann en los edificios donde WeWork es inquilino.
Neumann dijo al Financial Times en mayo que no planeaba diversificar su patrimonio más allá de WeWork. Agregó que no participó en una oferta de licitación a principios de este año cuando SoftBank —el mayor patrocinador de la compañía— hizo una recompra de acciones de WeWork de inversionistas y empleados con valor de mil millones de dólares.
“Esta compañía es en una etapa muy temprana. Quiero darle un segundo y realmente verla comenzar a madurar hasta el principio de su potencial”, dijo en ese momento, “y creo que nuestros colegas e inversionistas serían sensatos en hacer lo mismo”.
Las ventas de acciones y los préstamos del cofundador de WeWork se hicieron antes de que la compañía comenzará formalmente a trabajar en su OPI a principios de este año, dijo una persona cercana a Neumann. El efectivo que se recaudó se utilizó para ayudar a financiar una oficina familiar así como en inversiones en otras empresas.
Preocupación de inversionistas
WeWork archivó en forma confidencial los trámites ante los reguladores de valores de EU para una OPI a finales del año pasado, en un momento en que otras grandes compañías respaldadas por empresas de capital de riesgo se preparaban para su debut en el mercado público.
Dos de las compañías que los inversionistas han comparado con WeWork —las empresas de aplicaciones para solicitud de transporte que registran pérdidas, Uber y Lyft— tropezaron en sus salidas a bolsa, lo que provocó la preocupación de los inversionistas de WeWork que esperan poder vender sus acciones.
Para ayudar a apuntalar su inminente debut, WeWork ha trabajado con bancos para recaudar hasta 4 mil millones de dólares de deuda, de acuerdo con una persona familiarizada con el asunto.