Google acordó permitir que los motores de búsqueda rivales aparezcan en una de las propiedades inmobiliarias más valiosas de internet: la pantalla de inicio de cada teléfono Android en Europa.
Pero la concesión, que se hizo para tranquilizar a las autoridades antimonopolio, llega con un truco: los rivales de la empresa estadunidense tendrán que pagar una tarifa por cada usuario que se decida a usar su motor de búsqueda.
En la actualidad, Google está configurado automáticamente en todos los dispositivos Android como el motor de búsqueda predeterminado. Los usuarios ahora ya pueden cambiar por otro proveedor, pero se cree que pocos lo hacen.
El nuevo sistema permitirá a los usuarios establecer a un rival de Google como el motor de búsqueda predeterminado del dispositivo que tengan, cuando configuren el nuevo teléfono por primera vez.
La empresa estadunidense presentó el nuevo acuerdo en una publicación de blog el viernes, después de un fallo en su contra por parte de la Comisión Europea en julio de 2018. La comisión multó a Google con 4 mil 300 millones de euros después de encontrar que colocó “restricciones ilegales” en los smartphones Android que sirvieron para “consolidar su posición dominante en las búsquedas de internet en general”.
“El próximo año, vamos a introducir una nueva manera para que los usuarios de Android seleccionen un proveedor para alimentar un cuadro de búsqueda en su pantalla de inicio y de forma predeterminada en Chrome (si está instalado)”, dijo. “Google utilizará una subasta de oferta de sobre cerrado con el primer precio para seleccionar los otros proveedores de búsqueda general que aparecen en la pantalla de selección”.