Más de una cuarta parte de los miembros de la mayor iniciativa de sustentabilidad dirigida por directores generales de la industria de la moda no han logrado establecer objetivos básicos en materia del clima, cinco años después de su lanzamiento, y otros silenciosamente ya lo abandonaron.
El Pacto de la Moda (Fashion Pact), que puso en marcha el presidente francés Emmanuel Macron en la cumbre del G7 de 2019 en Biarritz, reunió a las principales marcas de moda, minoristas y fabricantes.
Pide a los miembros, entre ellos Inditex, H&M y Kering, que establezcan objetivos basados en la ciencia para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para 2030, en línea con el Acuerdo de París.
Pero cinco años después, 14 de los 52 miembros del Pacto que acordaron establecer objetivos no lo han hecho y tampoco se han comprometido a establecer objetivos, según datos de la iniciativa Science Based Targets, el principal árbitro independiente del mundo para los objetivos climáticos corporativos.
El grupo de moda italiano Calzedonia, el minorista de calzado Geox y la marca de lujo homónima del fallecido diseñador de Chanel Karl Lagerfeld se encuentran entre los miembros que todavía no establecen objetivos.
Eva von Alvensleben, secretaria general del Pacto de la Moda, dijo que “estamos conscientes del progreso que debe producirse”, reconociendo que “la industria necesita avanzar más rápido e ir más lejos”.
Añadió que desde noviembre del año pasado, el Pacto de la Moda había proporcionado “una estrategia colectiva de apoyo a los objetivos basados en la ciencia” y un nuevo requisito para que todos los miembros se comprometan a establecer estos objetivos para finales de 2025.
Eve Fraser, analista de políticas climáticas del NewClimate Institute, dijo que el fracaso de los miembros del Pacto de la Moda a la hora de establecer objetivos en materia ambiental demuestra la necesidad de “(tener) más ambición en las empresas multinacionales” en todos los sectores, y las limitaciones de las iniciativas voluntarias.
Fraser también advirtió de una notable “brecha de implementación” entre “los objetivos y la implementación real de las medidas de sustentabilidad y descarbonización” para los miembros con objetivos aprobados, entre ellos Nike, H&M Group e Inditex.
La tienda departamental estadounidense Nordstrom silenciosamente abandonó el Pacto de la Moda este año. Entre los antiguos miembros que se marcharon en años anteriores se encuentran la tienda departamental Selfridges y las marcas de lujo Stella McCartney y Hermès.
La industria es la fuente de entre 8 a 10 por ciento de las emisiones totales de gases de efecto invernadero, según la ONU, o casi tres veces más que la aviación. Pero su progreso en la reducción de emisiones se hace más complejo por las cadenas de suministro y valor altamente contaminantes que a menudo se extienden por varios países.
Si bien aproximadamente la mitad de las principales compañías de moda establecieron objetivos verificados, sus emisiones de la cadena de valor más amplia, que representan aproximadamente 96 por ciento de las emisiones de las marcas de moda, seguían aumentando, de acuerdo con un informe de este año del grupo de activistas Fashion Revolution.
ERR