Steven Mnuchin, secretario del Tesoro de EU, advirtió a China que evite “compromisos vagos” en una nueva ronda de conversaciones comerciales que se espera que se realicen después del acuerdo de cese al fuego que se alcanzó el fin de semana entre los presidentes Donald Trump y Xi Jinping.
En una entrevista con el FT después de lograr la tregua en una cena luego de la cumbre del G20, Mnuchin instó a Pekín a cumplir con los compromisos que hizo en Buenos Aires en las negociaciones de los próximos tres meses.
El “100 por ciento de nuestro equipo económico opina que esto tiene que ser un verdadero acuerdo”, dijo Mnuchin. “Estos no pueden ser compromisos vagos de China. Existe la necesidad de fechas específicas, elementos de acción específicos”, agregó.
Bajo el acuerdo del sábado con el que se logró dar una pausa a la guerra comercial de varios meses entre, Trump acordó no aumentar de 10 a 25 por ciento los aranceles sobre 200 mil millones de dólares (mdd) de importaciones chinas a partir del 1 de enero, como se tenía previsto.
A cambio, China acordó comprar bienes estadunidenses para reducir la diferencia comercial entre los países y seguir adelante con los cambios estructurales en su economía para abordar prácticas como el robo de propiedad y la transferencia forzosa de tecnología que EU considera injusto.
Trump también escribió en Twitter el lunes que Pekín acordó reducir los aranceles sobre las importaciones automotrices, aunque el gobierno chino no confirmó de forma inmediata un cambio en los gravámenes.
Los comentarios de Mnuchin sugieren que entre los funcionarios estadunidenses existen dudas de que China cumpla con los términos de la tregua. Estados Unidos dijo que si en tres meses no se logra un acuerdo en estos temas sensibles, los aranceles aumentarán como se esperaba originalmente.
El acuerdo al que se llegó la noche del sábado coronó un periodo de señales oscilantes sobre si China y EU podrían alcanzar un acuerdo. Después de que llegaron las dos delegaciones a Argentina, el viernes hubo una reunión entre Mnuchin, Robert Lighthizer, el representante comercial de EU, y Liu He, el viceprimer ministro chino, de acuerdo con un alto funcionario de la administración. Esa noche también hubo un breve intercambio entre Xi y Trump en el principal evento social de la cumbre del G20, una cena de gala en el Teatro Colón en el corazón de la capital argentina.
Pero el acuerdo solamente pudo lograrse una vez que los presidentes se encontraron frente a frente en una cena de sirloin en el hotel Park Hyatt la noche siguiente. “Xi explicó en gran detalle lo que estaban dispuestos a hacer”, dijo Mnuchin.
“Esta fue la primera vez en que los chinos presentaron una respuesta larga y específica tanto a los problemas estructurales como a los temas no estructurales. El presidente tomó una decisión sobre cómo proceder”, agregó.
Además de sus principales demandas, EU también presionó a China para que se abstenga de realizar una devaluación competitiva de su moneda para compensar el impacto de los aranceles. Si bien los funcionarios chinos se comprometieron previamente a no utilizar en la guerra comercial esa herramienta , lo volvieron a reiterar. “Sobre la moneda recibimos compromisos de que entienden ese problema y van a actuar de manera apropiada”, dijo.
El acuerdo que alcanzó Trump se recibió con alivio en los grupos empresariales estadunidenses, pero se enfrentó a una reacción negativa por parte de algunas personas de la base de partidarios del presidente quienes quedaron decepcionados de que no se mantenga la línea dura con China.
La tregua entre Estados Unidos y China puso fin a una cumbre del G20 que estuvo dominada por las preocupaciones sobre el comercio, durante la cual los funcionarios de la administración Trump fueron interrogados sobre lo que sucedería con el conflicto económico con Pekín. El FMI, entre otros, instó a una reducción en las tensiones comerciales debido a la preocupación de que eso desacelera el crecimiento mundial. “Claramente había un gran interés entre los países del G20 en la reunión”, dijo Mnuchin.
En el comunicado conjunto que acordaron los países se hizo un llamado para revisar la Organización Mundial de Comercio, y se dijo que el sistema comercial multilateral no “alcanzó” sus objetivos, en un lenguaje que refleja algunas de las crítica que se han hecho desde la administración Trump. Por primera vez, se hizo a un lado el compromiso tradicional del G20 para resistirse al proteccionismo.
90 Días dio Estados Unidos a China como límite para que ofrezca "algo concreto". El plazo inició el sábado.
25% Cobro de aranceles a los productos agrícolas estadunidenses. Washington espera que sea levantado.
200,000 Millones de dolares en aranceles a productos chinos quedaron congelados tras las conversaciones de Trump y Xi.
40% Tarifa punitiva de China a automóviles estadunidenses; Trump dijo en un tuit que Pekín "reducirá y eliminará" el arancel.
335,000 Millones de dolares sumó en 2017 el déficit estadunidense con China; muchos fabricantes dependen de insumos chinos.
1,200 Millones de dolares dólares ofreció XI en compromisos adicionales en materia de comercio, dijo ayer el lunes el secretario del Tesoro.
1.10% Avance de Wall Street en su apertura luego de la tregua.