Algunos de los competidores de Netflix empiezan a dar marcha atrás en una táctica de la guerra del streaming, al conceder licencias de sus antiguos programas y películas a varias empresas, lo que aumenta su oferta de programación, pero que también puede reducir sus márgenes de utilidades, según los analistas.
Cuando lanzó su servicio de streaming en 2007, Netflix dependía en gran medida de la programación bajo licencia de otras empresas. Pero después de que The Walt Disney, NBCUniversal, Paramount y en ese entonces Time Warner lanzaron sus propios servicios de streaming, retiraron muchos de sus programas de Netflix.
Sin embargo, ahora que los grupos de medios tradicionales están bajo la presión de obtener utilidades con el streaming, los ingresos por licencias vuelven a ser atractivos, aunque provengan de Netflix. Este verano, la cadena HBO de Warner Bros. Discovery empezó a conceder licencias a Netflix de viejas series, como Insecure, Six Feet Under, Ballers y Band of Brothers.
“La creencia popular de los últimos 10 años era que tenías que mantener todo en casa”, dice Casey Bloys, director ejecutivo de HBO. “Pero en la historia de la televisión, la sindicación de contenidos -vender un programa a otra empresa- era el objetivo que se buscaba. Significaba que la serie tenía éxito y que tendría vida en otra parte”.
Los analistas de Morgan Stanley dicen que el regreso de los acuerdos de licencia es “positivo a largo plazo” para Netflix. Pero añadió que el costo de las licencias podría agregar presión a sus márgenes de utilidades en 2024. Los analistas elevaron sus previsiones para el gasto total en efectivo de Netflix el próximo año en 500 mdd, hasta los 17 mil 700 mdd.
Netflix presentó sus resultados el miércoles pasado, y se espera que los inversionistas centren la atención en si tiene previsto aumentar los precios de las suscripciones y en las señales de progreso de su nuevo nivel con publicidad. También se analizarán los últimos datos sobre su ofensiva contra el uso compartido de contraseñas.
El regreso de los acuerdos sobre licencias coincide con las huelgas en Hollywood. A pesar del pesimismo en torno, los experimentos de los estudios con acuerdos de licencia al parecer le dan nueva vida a algunos viejos programas. Después de que NBCUniversal concedió en junio a Netflix la licencia de su serie La ley de los audaces (Suits) -programa que se transmitió de 2011 a 2019 y que protagonizó Meghan Markle-, la serie experimentó un renacimiento. El drama legal ocupó el primer puesto del top 10 de Nielsen Streaming durante tres meses, un ejemplo del “efecto Netflix” en viejas series.
Casey Bloys dice que la concesión de licencias a Netflix también impulsó el tráfico de los programas en la plataforma de Max de Warner Bros. Discovery, que alberga programas de HBO como Ballers, un drama deportivo que se emitió de 2015 a 2019, e Insecure, una comedia protagonizada por Issa Rae, que se transmitió de 2016 a 2021, tuvo un impulso similar.
Hay límites, añade Bloys, al nombrar dos populares series de HBO que tal vez se mantengan fuera de los límites de Netflix. “Dudo que lleguen a ver (en Netflix) Succession o White Lotus”, menciona.
RPG