El empleo en las empresas que fabrican equipo para la industria de energía solar será más bajo este año que en 2017, a pesar del reciente resurgimiento que vivió tras recibir la ayuda de los aranceles que introdujo la administración Trump el año pasado, estiman especialistas del sector.
En una encuesta anual de empleo de la Solar Foundation, organización sin fines de lucro con respaldo de la industria, estima que alrededor de 35 mil personas trabajarán en la fabricación de paneles, soportes y otros componentes en Estados Unidos este año, en comparación con alrededor de 34 mil de 2018, pero por debajo de un punto máximo de 38 mil en 2016.
El presidente Donald Trump introdujo un nuevo arancel de 30 por ciento a las celdas y paneles solares a principios del año pasado, en una de las primeras acciones de su estrategia para utilizar barreras de importación y reactivar la fabricación estadunidense. Los resultados después de un año muestran que esas ambiciones solamente lograron un éxito limitado, aunque los peores temores de un impacto devastador en el desarrollo de nuevos proyectos solares tampoco se cumplieron.
La capacidad de fabricación en EU para paneles solares, o módulos como se les conocen en la industria, aumenta considerablemente. En el tercer trimestre de 2018, la producción funcionaba a una tasa anualizada de alrededor de 1.2 gigavatios de generación al año, y empresas como Hanwha Q-Cells, First Solar y Jinko Solar, planean aumentar eso en alrededor de 4 gigavatios más, según calcula la Solar Foundation.
La capacidad de fabricación alcanzará el equivalente a más de la mitad de los 8.2 gigavatios de la nueva generación de energía solar que la Administración de Información de Energía de EU espera que se instale este año. Un aumento en la producción nacional representará un enorme cambio en comparación con lo que se dio en los últimos 12 meses contabilizados hasta octubre de 2018, cuando alrededor de 90 por ciento de los paneles que se utilizaron en Estados Unidos era de importación.
Lo aranceles se establecieron para disminuir en cinco puntos porcentuales cada año hasta 2021, y son solamente un factor en las decisiones de ubicación de las empresas de energía solar. El Departamento de Comercio liberó los aranceles a los paneles de First Solar, uno de los mayores fabricantes con sede en EU, pero ellos aun aumentan su capacidad de producción en Estados Unidos.
La compañía afirmó el año pasado que la fuerte demanda y los “cambios recientes en las políticas de impuestos corporativos en EU, alentaron nuestra decisión de crecer”.
SunPower, otra de las compañías de energía solar más grandes de Estados Unidos, reubicó en Oregon la producción de sus paneles menos avanzados, tomando el control de una fábrica que anteriormente administraba SolarWorld. Los paneles más avanzados obtuvieron una exención de aranceles y seguirán siendo importados.
Tom Werner, director ejecutivo de SunPower, señaló la semana pasada que la compañía invierte en la fabricación en Estados Unidos porque quiere ofrecer a sus clientes la opción de comprar sus paneles “ensamblados aquí mismo en casa”. Los aranceles también fueron un factor en esa decisión.
Sin embargo, las nuevas inversiones no suman un gran número de puestos de trabajo. First Solar dijo que su planta en Ohio crearía 500 empleos, y SunPower le da trabajo a 200 personas en Oregon.
Los productores de módulos representan solamente 31 por ciento de los fabricantes que encuestó Solar Foundation, mientras que otros fabrican componentes como sistemas de montaje e inversores, que se utilizan para convertir la corriente continua de un panel a una corriente alterna. La fundación espera que en toda la industria de fabricación del sector de energía solar, se agreguen alrededor de mil 200 empleos este año, después de una caída de alrededor de 4 mil 400 en el periodo de 2016 a 2018.
Sin embargo, por mucho, la mayor fuente de empleo en la industria de energía solar de Estados Unidos se encuentra en la instalación y desarrollo de proyectos. Los aranceles de la administración Trump causaron alarma en la industria de que esas actividades pueden verse afectadas por un aumento en el precio de los paneles, lo que amenazaba con hacer que la energía solar fuera menos competitiva.
Ese supuesto no sucedió. Los recortes en los subsidios a la energía solar en China significaron un exceso de suministro de paneles en los mercados mundiales, y los precios continuaron cayendo a escala global y en EU.
Los trabajos en instalación y desarrollo de proyectos disminuyeron alrededor de 10 mil el año pasado, pero hubo otros factores, entre ellos la incertidumbre de las políticas en California, que contribuyeron a esa desaceleración, y se espera que el número se recupere a cerca de 14 mil este año.
Andrea Luecke, presidenta de la Solar Foundation, dijo que como 2019 fue el último año para que los proyectos de energía solar fueran elegibles para el Crédito Fiscal de Inversión completo de 30 por ciento, espera otro año “bastante fuerte” para los desarrollos.
Trump se queda corto en impulso a energía solar
Fallan aranceles. Proyecta encuesta de The Solar Foundation una caída en empleo en el sector de generación fotovoltaica.
Nueva York /
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