Google desató las críticas por alentar a las editoriales de noticias que participan en su programa Iniciativa de Noticias Digitales (DNI, por su sigla en inglés) a que presionen contra los cambios propuestos a la ley de derechos de autor de la Unión Europea, en un momento en que el acosado sector recurre cada vez más a la ayuda del gigante de búsquedas.
Google se opone a la directiva de derechos de autor, la cual dice impedirá el libre flujo de información, y en un correo electrónico reciente a las editoriales sugirió que entraran en contacto con miembros del Parlamento Europeo para expresar sus puntos de vista.
El motor de búsquedas desarrolló vínculos estrechos con las editoriales a través de su programa DNI, que ofrece apoyo para el periodismo digital al igual que becas de innovación de un fondo de 150 millones de euros.
En un correo electrónico a los miembros del grupo de trabajo DNI —que pudo ver el FT—, Madhav Chinnappa, director de relaciones estratégicas de Google, escribió que el “tiempo apremia” y proporcionó un enlace al directorio de miembros del Parlamento Europeo. “Si están convencidos sobre esto, por favor consideren contactar a los miembros del Parlamento Europeo”.
Jason Kint, director ejecutivo de Digital Content Next, dijo que la compañía fue demasiado lejos. “Es indignante que Google utilice una vez más un foro al que convocó públicamente para ayudar a la industria editorial como un vehículo para cabildear en nombre de los intereses de Google y confundir el mercado”, dijo.
Es parte de una campaña más general de desinformación sobre el nuevo régimen de derechos de autor, enviando todos los días mensajes no deseados al Parlamento Europeo con afirmaciones falsas de que las nuevas reglas van a introducir filtros para subir datos y romperán internet, dijo Helen Smith, presidenta ejecutiva de Impala.
La actualización de la directiva de derechos de autor de la Comisión Europea, concebida por primera vez en 2015, dividió a los gobiernos de la Unión Europea y es objeto de un intenso cabildeo por parte de las editoriales —que quieren un pago justo por su contenido— y activistas en línea que argumentan que frenaría las libertades en internet.
Bajo los cambios propuestos, los gigantes de internet y las redes sociales como Twitter deberían obtener una licencia para mostrar fragmentos de noticias, una propuesta que los críticos calificaron de un “impuesto de enlace”.
Google dijo al FT que el correo electrónico se envió a las editoriales en respuesta a una solicitud de ellos para obtener información sobre la directiva de derechos de autor de la Unión Europea. “Dijimos antes que la innovación y la asociación son la mejor manera de mantener el ecosistema general de noticias tanto para las editoriales como para los consumidores, no esta propuesta legislativa”, dijo Chinnappa en un comunicado.
“El objetivo del grupo de trabajo de DNI es intercambiar puntos de vista y mejorar la colaboración entre la industria de las noticias y Google. El grupo nos pidió que se les enviaran nuestras opiniones sobre la reforma de derechos de autor en Europa, y nos complació compartir nuestra posición y un resumen de las opiniones de otros”.