El mercado enfocado al financiamiento de vehículos en México está pasando por un momento “muy extraño” a consecuencia de la falta de semiconductores que ha permeado la manufactura del sector en los últimos meses, que ha traído consigo bajas y afectaciones en inventarios, aseveró la empresa dedicada a generar soluciones de inteligencia automotriz JATO Dynamics.
El director de la firma para América Latina, Gerardo San Román, expresó en el reporte de financiamiento automotriz al mes de septiembre, que por primera vez observa que “hay más demanda que oferta, entonces todo puede suceder”, añadió.
Indicó que los recientes resultados no tuvieron variaciones en cuanto a los registrados en agosto, sin embargo, hay mucha volatilidad en el mercado, por lo que no puede definirse una conducta o un patrón a seguir, cuestión que antes de esta escasez de insumos sí era posible.
El mayor financiamiento en el segmento de los vehículos subcompactos se concentró en el plazo de 60 meses en septiembre, al igual que en el correspondiente a los compactos, SUV’s y pick-ups.
“Realmente no hay una forma matemática o estadística para poder predecir a ciencia cierta qué es lo que va pasar, porque hay muchos factores que están interviniendo ahorita. Tenemos factores desde macro hasta micro”, agregó.
Además, dijo que las afectaciones en las cadenas de suministro no son las únicas cuestiones que repercuten en el sector, puesto que también lo hace el encarecimiento del acero, aluminio e hidrocarburos, “que todo de alguna manera está impactando”.
Otros de los cambios que han sucedido en esta industria es que las automotrices están tratando de incrementar sus inventarios, sin embargo, prácticamente cada vehículo que llega a stock ya está vendido, por dicha falta de oferta.
Sobre esto último, explicó que las instituciones de financiamiento han optado por regresar a esquemas más tradicionales, de tal forma que en unos meses, es probable que se vea un repunte en los plazos de compra de 36 y 48 meses, los cuales hasta el momento no han sido tan populares entre los consumidores.
“Está generando que también los incentivos hayan disminuido notoriamente en su agresividad, es decir, se está tratando de hacer más ventas sin incentivos o sin descuentos o con planes de financiamiento un poco más tradicionales”, argumentó.
AMP