Rentar un inmueble no es tarea fácil, pero como arrendador es necesario tomar en cuenta los riesgos que conlleva poner a disposición de extraños un patrimonio, es por esto que se necesita contar con servicios de protección jurídica que garanticen los ingresos mes a mes por este servicio, tal como el que otorgan las fianzas inmobiliarias.
Las llamadas pólizas jurídicas buscan equilibrio entre arrendador y arrendatario.
¿Qué son las pólizas jurídicas?Se trata de un servicio que consiste en un análisis jurídico, financiero y moral de las personas a quien se les rentará un inmueble con la intención de conocer a la persona a quien se le rentará la propiedad y determinar el riesgo que existe para poder elaborar un contrato específico, según Segurenta.
El fundador y director de Segurenta, José Antonio Valle, indicó que este tipo de servicios aplican para la renta de casas, oficinas, departamentos y espacios comerciales, en los que se analizan y diseñan contratos de arrendamiento con con servicios de asistencia jurídica que aplican en caso de incumplimiento de pago, robos o siniestros que afecten al inmueble y en los que se deba realizar el cobro de alguna póliza.
“El arrendamiento está creciendo en el país y va a necesitar de herramientas para que los contratos se lleguen a buen fin, y este producto es algo que facilita mucho la interacción entre propietario e inquilino, las personas tienen más confianza a quien se le está rentando”, explicó el especialista en derecho inmobiliario.
Valle agregó que antes de contratar este tipo de servicios extra, es necesario conocer a la empresa con la que se adquiere el servicio, a fin de que no se tratase de un fraude y se pueda hacer frente a cualquier inconveniente relacionado con la renta.
Además de ser un contrato personalizado, también se realiza un archivo fotográfico de las condiciones en las que se encuentra el inmueble y se vigila durante todo el año que el contrato se cumpla. El costo de este servicio, en el caso de Segurenta, es del 30 por ciento de la renta del primer mes y mantiene la cobertura anual.
Recomendó que los arrendadores cumplan con las obligaciones fiscales de rentar un inmueble, mismas que solo representan 10 por ciento. El no estar en la formalidad representa un riesgo alto que podría ocasionar hasta la pérdida del inmueble y que en pocas ocasiones son recuperados por falta de comprobantes fiscales.
MRA