Ocho empleados de Volkswagen, entre ellos gerentes, fueron acusados de participar en el escándalo de los autos de la compañía con motor diésel equipados con un software que les permitía hacer trampa en las pruebas de emisiones, anunciaron fiscales alemanes.
Los fiscales en Braunschweig no identificaron a los ocho acusados, citando las reglas de privacidad alemanas. Dijeron que los sospechosos tienen entre 50 y 72 años y que enfrentan cargos que incluyen perpetrar o participar en un fraude grave entre 2006 y 2015, proporcionar indirectamente una certificación incorrecta y violar una ley sobre competencia desleal.
Algunos de ellos también fueron acusados de abuso de confianza y evasión fiscal, o de ser cómplices de esos delitos.
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Los nuevos cargos fueron presentados después de que a principios de mes un tribunal de Braunschweig decidió que el ahora exdirector ejecutivo de Volkswagen Martin Winterkorn debe ser juzgado por cargos de fraude. Dijo que otros cuatro acusados enfrentarían juicio por cargos de fraude en relación con evasión fiscal agravada y publicidad ilegal. Aún no se han anunciado las fechas para ese juicio.
Winterkorn renunció días después de que la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA por sus siglas en inglés) anunciara el engaño el 18 de septiembre de 2015.
La compañía usó durante años un software que activaba ciertos controles de emisiones cuando reconocía que los vehículos estaban en los equipos de pruebas, pero que los apagaba durante la conducción normal. Como resultado, esos vehículos emitieron mucho más óxido de nitrógeno, un contaminante, que el límite legal en Estados Unidos.
Volkswagen pagó más de 30 mil millones de euros (35 mil millones de dólares) en multas y acuerdos por el escándalo.
srgs