La agencia calificadora Fitch revisó la perspectiva calificación crediticia de Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México, (GACM) a negativa estable y afirmó la calificación 'BBB-' de las notas senior garantizadas.
Esto como consecuencia de las medidas gubernamentales como la segunda reducción de vuelos, así como las necesidades de mantenimiento de las instalaciones aeroportuarias en la capital del país.
El mes pasado se redujo el número de operaciones máximas permitidas en el aeropuerto de 52 a 43 por hora, aproximadamente un 30 por ciento menos que los niveles de 2022, provocando que aerolíneas y organizaciones del sector señalaron que la medida obstaculiza gravemente la conectividad del transporte aéreo.
Agregó que la situación de los vuelos puede exacerbar el riesgo de refinanciamiento de los bonos del emisor con vencimiento en 2026 y 2028 por un monto total de mil 400 millones de dólares, lo que los hace inconsistentes con una calificación crediticia de grado de inversión.
“La revisión de la perspectiva a negativa refleja las crecientes preocupaciones de Fitch sobre la capacidad del proyecto para abordar sus importantes necesidades de mantenimiento y la importante congestión de pasajeros sin afectar las finanzas del aeropuerto”
La calificadora agregó que si bien estos problemas no son nuevos, recientemente se han agravado y han provocado un deterioro acelerado de la condición física de las instalaciones hasta el punto en que los clientes y empleados podrían resultar heridos.
Además recordó que el mes pasado una parte del techo de las instalaciones se desprendió con lo que la Terminal 1 se inundó debido a que el sistema pluvial se llenó en exceso y varios drenajes quedaron comprometidos.
“La lluvia fue más intensa de lo habitual, pero los daños sufridos por la infraestructura revelan su mal estado y la urgente necesidad de un mantenimiento adecuado”, dijo.
Además México no ha podido recuperar su calificación de seguridad aérea Categoría 1 que perdió desde 2021.
PMA