Proveniente de una familia católica que creó en Italia uno de los grandes imperios del chocolate, Giovanni Ferrero siempre estuvo relacionado con la empresa, escalando puestos dentro de ella, hasta convertirse en su presidente, pero sin dejar de lado sus dos principales hobbies, escribir novelas y escuchar rock.
Su vida personal seria y alejada de los reflectores dista mucho de la laboral, donde es arriesgado y gustoso de buscar la aventura en la compra de competidores, lo cual lo ha llevado a tener una fortuna valuada en 21 mil 800 millones de dólares y ser el hombre más rico de la nación europea.
Su trabajo dentro de la empresa chocolatera Ferrero lo ha sabido combinar con su gusto por escribir, de forma que tiene publicados dos libros de marketing y cinco novelas, entre las que se encuentra, Campo Paradiso (2008), ambientada en África, o Il canto delle farfalle (2010).
Estudió en Europa y se especializó en marketing en Estados Unidos, actualmente su día a día se divide entre Bruselas, donde vive con su esposa Paola Rossi y sus dos hijos Michele y Bernardo y Luxemburgo, donde está la matriz de Grupo Ferrero.
Su ascenso en la empresa chocolatera Ferrero se dio de la forma menos afortunada, al tomar el puesto mayor tras la muerte repentina de su hermano Pietro en 2011, quien sufrió un ataque al corazón mientras paseaba en bicicleta durante un viaje de negocios en Sudáfrica.
Al tomar el mando dio un vuelco a la estrategia y posturas de sus antecesores, quienes pensaban que la compañía por sí sola podía salir adelante, sin embargo, Giovanni salió al mercado a conocer y vislumbrar qué competidores podría comprar para crecer.
La primera adquisición la realizó en 2015 cuando por la nada despreciable cifra de 170 millones de dólares adquirió la compañía chocolatera británica Thorntons, sin embargo, la joya de la corona se la llevó en 2018 al comprar el negocio de dulces de la estadunidense Nestlé por 2 mil 800 millones de dólares.
A pesar del ascenso en los negocios y una mayor presencia internacional, Giovanni ha conservado la esencia familiar del negocio al negar que Ferrero cotice sus acciones en la bolsa de valores y mantener las finanzas sanas, alejado de los vaivenes económicos.
Educado bajo los valores católicos, Giovanni reveló que su padre era tan devoto que hizo poner en cada una de sus fábricas una figura de la Virgen de Lourdes y año con año organizaba peregrinaciones a las zonas más religiosas de Italia.
Con una presencia y fábricas en el norte y sur de América, Asia Sudoriental, Europa del este, África, Australia y más recientemente en Turquía y China, Ferrero, bajo el mando de Giovanni, planea su siguiente compra, que la consolidara como la tercer empresa chocolatera más grande del mundo.
21,800 Millones de dólares es la valuación de su fortuna, lo que lo convierte en el hombre más rico de Italia.
2,800 Millones de dólares fue lo que pagó por el negocio de dulces de la estadunidense Nestlé.