Para 2019, el gobierno federal estima que los ingresos presupuestales totales asciendan a 5.274 billones de pesos, lo que implica un aumento de 194 mil 700 millones de pesos, con respecto a lo estimado en la Ley de Ingresos de 2018.
Para el próximo año no se proponen aumentos en las tasas de los impuestos existentes ni la creación de impuestos nuevos, pero sí se propone implementar un paquete de estímulos focalizados en los municipios de la franja fronteriza norte, que tendrá un costo fiscal de 44 mil 200 millones de pesos.
De acuerdo con lo presentado en el Paquete Económico 2019, del monto total previsto 1.045 billones de pesos (19.8 por ciento) corresponderán a ingresos petroleros, 3.287 billones (62.3) a ingresos tributarios, 120 mil 300 millones (2.3) a ingresos no tributarios, y 821 mil 500 millones (15.6) a ingresos de organismos y empresas.
Dentro de los ingresos tributarios, por concepto de Impuesto sobre la Renta (ISR) se estima recaudar 1.734 billones de pesos, 11 por ciento más que lo establecido en la Ley de Ingresos de 2018; por Impuesto al Valor Agregado (IVA) 989 mil 011.3 millones, 13 por ciento más; por Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) 437 mil 900.9 millones, un aumento de 4 por ciento; y por IEPS a gasolinas 269 mil 300.5 millones de pesos, lo que significa un incremento de 4 por ciento.
Estos impuestos representarán 59 por ciento del total de los ingresos que percibirá el gobierno federal en 2019.
El estímulo en la frontera norte consistirá en una tasa de IVA reducida de 16 a 8 por ciento y una disminución de un tercio de Impuesto Sobre la Renta (ISR) a personas morales y personas físicas con actividad empresarial, de 30 a 20 por ciento.
La tasa reducida del IVA busca incrementar la demanda agregada y ayudar a reactivar los mercados en la región, mientras que la tasa reducida del ISR permitirá a las empresas y personas físicas con actividad empresarial destinar mayores recursos a la inversión, y por tanto, generar más empleos y aumentar su competividad.
Se estima que el costo fiscal de este estímulo será de 19 mil 600 millones de pesos para el IVA y de 22 mil 600 millones para el ISR.
La decisión de no elevar impuestos se sustenta en que antes de considerar modificaciones de fondo al marco tributario, como las que implicaría una reforma fiscal de gran alcance, se debe garantizar que los recursos existentes se ejerzan con el mayor grado de transparencia y eficiencia posibles.
En este sentido, en los primeros años de la administración de Andrés Manuel López Obrador se buscará fortalecer la recaudación, mejorando la eficiencia de la administración tributaria, así como reducir los espacios regulatorios que pudieran permitir esquemas de elusión y evasión fiscales, con la finalidad de que el sistema impositivo sea más justo y cada contribuyente pague adecuadamente lo que le corresponde.
MCM