Los mexicanos que necesiten recaudar fondos ahora podrán solicitar donaciones en GoFundMe, anunció el martes la empresa, mientras el gigante de la financiación colectiva se expande en lo que, espera, será el primero de varios mercados sin aprovechar en América Latina.
México es el vigésimo país en el que GoFundMe presta servicios; la plataforma empresarial evalúa mercados internacionales ahora que la presión sin precedentes impuesta por niveles de campañas de financiación colectiva desatados por el covid-19 se relaja hasta alcanzar niveles previos a la pandemia, dijo Tim Cadogan, director general de la empresa.
GoFundMe en su crecimiento internacional
El estatus de México como una de las 15 economías más grandes del mundo y como socio cercano de Estados Unidos lo convierten en una opción lógica, dijo Cadogan, al igual que el interés de las personas, evidenciado por el volumen de búsquedas de GoFundMe y los intentos de usuarios para establecer campañas en su país.
La compañía ve que sus solicitudes de ayuda para gastos médicos y asistencia de emergencia, generalmente populares, son comunes en México, un país con gastos directos de salud relativamente altos y con antecedentes de desastres naturales graves.
Cadogan señaló los mortíferos efectos del huracán Otis, categoría 5, en Acapulco, Guerrero. La comunidad de GoFundMe recaudó cerca de 1.5 millones de dólares para contribuir en los esfuerzos de recuperación y reconstrucción, dijo Cadogan. Sin embargo, los mexicanos no pudieron iniciar campañas.
“Si hubiéramos podido hacerlo en ese momento, creo que más personas habrían podido usar del servicio”.
México sigue siendo un país donde cerca de la mitad de la población vive en la pobreza y donde cualquier gasto inesperado, frecuentemente de tipo médico, pero también relacionado con sucesos tan aterradores como el secuestro o la extorsión, puede generar solicitudes de financiación.
Los usuarios estadunidenses han logrado sortear las restricciones geográficas abriendo campañas de GoFundMe a nombre de sus familiares en México u otros países latinoamericanos, de acuerdo con Jeremy Snyder, experto en bioética que investiga financiación colectiva de tipo médico. Snyder espera que la expansión facilite el flujo de dinero entre usuarios de ambos países, donde muchas familias tienen lazos en ambos lados de la frontera. Concluyó:
“Es simplemente una prueba más de la difusión y la normalización de la financiación colectiva”.
EDD