Goldman Sachs recortó en torno a 16 por ciento su objetivo del índice referencial S&P 500 para fines de 2022, hasta los 3 mil 600 puntos, debido a que la Reserva Federal (Fed, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos está mostrando pocos indicios de dar un paso atrás en su agresiva política de subidas de tasas de interés.
Analistas de Goldman Sachs escribieron en una nota a última hora de ayer que la trayectoria de tasas prevista por parte del banco central es ahora superior a su estimación anterior. Su objetivo previo era de 4 mil 300 puntos y el índice S&P 500 cerró por última vez a 3 mil 758 puntos.
"Basándonos en las conversaciones con nuestros clientes, la mayoría de los inversores en renta variable han adoptado la opinión de que un escenario de aterrizaje duro es inevitable y su atención se centra en el momento, la magnitud y la duración de una posible recesión y las estrategias de inversión para esa perspectiva", escribió David Kostin, analista de Goldman.
La Fed indicó el miércoles que los responsables de la política monetaria mundial "seguirán" luchando por reducir la inflación, y subió las tasas en 75 puntos básicos por tercera vez consecutiva, indicando que el costo de los préstamos seguirá subiendo este año.
Kostin indicó que la inflación resultó ser más persistente de lo previsto y que es poco probable que muestre signos claros de relajación a corto plazo, lo que lleva a estimar aún más el endurecimiento de la Fed.
"La mayoría de los gestores de carteras creen que, para acorralar la inflación, la Fed tendrá que subir las tasas lo suficiente como para provocar una recesión en Estados Unidos en algún momento de 2023", añadió.
MRA