La caída en los precios internacionales del petróleo hizo que la Secretaría de Hacienda redujera drásticamente el precio promedio de la mezcla mexicana de exportación esperado para este año a sólo 24 dólares por barril, cifra muy por debajo del precio aprobado por el H. Congreso de la Unión en el Paquete Económico para este 2020 que fue de 49 dólares.
De acuerdo con los Precriterios de política económica 2021, el precio estimado está en línea con las condiciones económicas actuales a nivel internacional y, particularmente, con las perspectivas a la baja en el mercado petrolero. Tan solo este 1 de abril el precio de la mezcla mexicana se ubicó en 10.61 dólares por barril.
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Para 2021 se estima que el precio promedio de la mezcla mexicana sea de 30 dólares por barril, precio significativamente menor a los 43 dólares al precio máximo que se obtiene utilizando la metodología especificada en la legislación. La nueva estimación se encuentra en niveles cercanos al precio implícito en las cotizaciones de los mercados de futuros del crudo WTI.
“Destaca una fuerte caída en la demanda por petróleo y otras materias primas, que está propiciando una reducción en sus precios internacionales. La situación del mercado petrolero se ha visto exacerbada por la guerra de precios del petróleo entre Arabia Saudita y Rusia, que ha resultado en una mayor disminución en los precios de los energéticos a nivel global”, destaca el documento.
Hacienda reiteró la importancia de Pemex como activo estratégico del país, por lo que dijo “evalúa medidas de apoyo adicionales a las ya implementadas para este año. No obstante, Pemex buscará realizar economías, así como fuentes alternativas de ingresos para enfrentar los efectos sobre sus finanzas de la reducción en el precio del petróleo”.
Detalló que desde 2019 los precios internacionales del petróleo exhibieron una elevada volatilidad resultado, principalmente, de la evolución de las tensiones comerciales y de la existencia de conflictos geopolíticos.
Al cierre del año, estos precios mostraron una recuperación moderada, impulsada por incrementos en los recortes de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados y por el alivio de las tensiones comerciales. No obstante, en 2020, la mayor incertidumbre y las perspectivas de un menor crecimiento resultado de la propagación del Covid-19, propiciaron una caída en los precios del petróleo. En este contexto, las negociaciones entre la OPEP y sus aliados se vieron frustradas, lo que inició una guerra de precios entre Arabia Saudita y Rusia, generando reducciones adicionales en el precio del crudo.
MCM