La llegada a México de Ikea, compañía minorista de la industria del mueble, en octubre de 2020 impuso a los fabricantes de muebles mexicanos nuevos retos para su crecimiento.
En conferencia, Teresa Calderón, presidenta de la Asociación de Fabricantes de muebles de Jalisco (Afamjal), señaló que con la incursión de la firma los productores nacionales han transformado sus operaciones, en línea con la demanda de los consumidores.
“Ikea nos está dando un reto donde todos los productores estamos encontrando un formato diferente de producción y vamos a tener capacidad de protegernos, esto debe ser poco a poco y de acuerdo a las capacidades. Debemos enseñarle a los asociados a hacer un producto de acuerdo al mercado, como lo exige, no sólo en exportación, grandes volúmenes, calidad sino también con el formato en un servicio continuo y a mejor precio”, señaló en el marco de la presentación Expo Mueble Internacional.
De acuerdo con la Secretaría de Desarrollo Económico de Jalisco, este sector aporta alrededor de 2 mil 422 millones de pesos al Producto Interno Bruto (PIB) nacional y es la tercera industria con mayor número de unidades económicas en el país; de éstas, alrededor de 95 por ciento son micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes).
“En 2020, tuvimos un incremento de ventas de 5 por ciento; y ahora tenemos una situación muy especial: estamos preparándonos para exportar, para ser un mercado que vamos a proteger y a defenderlo con nuestras capacidades, fortalezas y alternativas. El mercado americano y canadiense está viéndonos como empresas que vamos a fortalecer la producción para conseguir sus solicitudes”, dijo la presidenta de la asociación.
Según el organismo, gran parte de la demanda de productos viene por la parte de sillas, comedores, salas, y derivado de la emergencia sanitaria, muebles para el exterior y para adaptar oficinas en casa. Este año, la Afamjal estima que habrá un crecimiento de 7 por ciento en el sector.
Retrasos de concesionarias en Puerto de Manzanillo
La industria mexicana de muebles alertó una falta de seguimiento en infraestructura logística por parte de Grupo Hazesa y Contecont, concesionadas en el Puerto de Manzanillo para el transporte de mercancías; un tema que afirman ha retrasado la entrada de productos y el desarrollo del sector.
“El problema es quien está concesionado a bajar del barco y subir al transporte, son empresas privadas. Fuimos a exigirles infraestructura, nos hablaron de grúas; hacía falta que llegáramos los que verdaderamente estamos preocupados de la carga, son los que son los encargados de la manufactura. Necesitamos ponernos a exigirle al transporte que entre a las reglas. Los montacarguistas tienen que entrar a un rol de ajuste. No es un tema de la marina, sino también de lo que se concesionó”, señaló Rubén Masayi, coordinador del consejo de cámaras industriales de Jalisco (CCIJ).
Fue en 2013 cuando Hazesa participó en una licitación para una Terminal de Usos Múltiples (TUM) en el puerto de Manzanillo, misma que se le adjudicó para construir Hazesa Terminal Marítima.
“Estamos trabajando en ello. Hay que poner a todos los operadores en un registro, requiere datos para agilizar; también Estados Unidos está recabando datos de operadores y transportes para que por medios de datos digitales se dé la obtención y liberación del vehículo, eso es lo que lo hace tardado; va a ir mejorando conforme vayamos entrando a esos registros , como el sistema del Proyecto de Integración Tecnológica Aduanera (PITA)”, dijo el representante.
Este tema, afirmaron, ha sumado al incremento en costos de materia prima, que en algunos casos ha sido hasta de 35 por ciento.
Masayi afirmó que la industria no es la única afectada por el tema y que su intención es solicitarles que hagan una reconversión de sus operaciones. En este tenor, sostuvo que es preciso contar con más grúas, montacargas y bodegas techadas, principalmente.
De acuerdo con los representantes, la entrada de la Marina ha representado un cambio en este sentido, aunque sostuvieron que todavía hace falta por hacer nuevos cambios en este sentido.
“Ellos están en un proceso más rápido. El tema son las citas, porque las están reagendando. Hay importaciones que afectan en Manzanillo. Tengo dos contenedores parados desde hace un mes y eso no ha avanzado; existe un verdadero problema. Pedimos que busquen cómo complementar el tema que les está afectando, para que no se retrase el tema de mercancías, que es el tema principal”, dijo por su parte José Abugaber, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales de México (Concamin).
AMP