Debido a la importancia que tiene el gasto público en el crecimiento y el desarrollo del país, su adecuado ejercicio es fundamental y una buena parte estará determinado por las compras del gobierno, pero si éstas no se centralizan adecuadamente, el gasto se podría entorpecer o retardar, alertó el Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP).
“Entre menos especializado sea el bien que se adquiere, será más fácil centralizar su compra o adquisición, pero entre más complejo sea (carreteras, instrumentos médicos especializados, etc) será más compleja su centralización y podría llegar a perder eficacia y rapidez el proceso de licitación, con lo cual se vería frenado el gasto público”, indicó el presidente de la Comisión de Revista del IMCP, Moisés Alcalde.
En conferencia con medios, destacó que en diciembre pasado (primer año de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador), el gasto público programable cayó 25.3 por ciento real respecto al mismo mes de 2017, por lo que es importante agilizarlo.
Alcalde indicó que, si bien, el proceso de compras suena fácil, es un reto no menor, y disminuir la corrupción en las áreas que las llevan a cabo también es una tarea sustantiva, a lo que se suma que las áreas de licitación centralizada deben de tener una serie de especialistas que permita tener conocimiento para ir al mercado y elegir las mejores opciones.
Cae confianza económica, afecta evaluación de situación actual
En enero pasado, el Índice Mexicano de Confianza Económica cayó 3.15 por ciento, en comparación con el mes previo, afectado por un descenso de 5.52 por ciento en la percepción sobre la situación actual y de 0.44 por ciento en la situación dentro de seis meses.
El presidente de la Comisión de Análisis Económico del IMCP, Ernesto O’Farril, señaló que en los resultados del indicador sorprendió que la caída en la percepción futura no haya sido tan pronunciada, lo que sugiere que todavía hay expectativas de que mejore.
LVM