En el primer semestre de 2023 se importaron 72 mil remolques llamados madrinas de distintos tamaños, unidades utilizadas en camiones para el transporte de vehículos ligeros, luego de más de un año sin haber entrado al país, muestran datos del Banco de México (Banxico).
Esto sucede, según representantes del sector automotor, por una escasez en el mercado nacional de este tipo de unidades, lo que ha causado el retraso en entregas en centros de venta (distribuidores), así como el movimiento de autos traídos de otros países por puertos marítimos.
Guillermo Rosales, presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA), destacó que los prestadores del servicio logístico les dicen que hay una falta de este tipo de unidades a nivel regional, por lo que también se sufre en Estados Unidos y Canadá.
“Los tiempos de suministros que nos comparten las empresas de autotransporte nos indican hasta dos años de espera, por el tema de insuficiencia en la región y hasta en el mundo, y por eso la crisis que sufrimos en la logística”, expresó.
Aunque hay existencia de producción nacional, también habla de una dependencia al producto externo y a la espera en lo que llegan estos remolques.
Por su parte, Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (Anpact), explicó que por la parte del tractocamión, el tiempo de espera en la producción depende de qué tipo de unidad quieran, pues hay algunos con techo especial para cargar ahí también un auto.
“Hay dos tipos de configuración de madrinas, uno es con un techo especial en la cabina o que tienen la configuración tractocamion semirremolque remolque, tienes también las configuraciones con dos remolques, unas son más usadas que otras”, contó.
Sin embargo, dijo que los tiempos de espera no son similares que los remolques, remarcando que si hay un cuello de botella en la producción de madrinas no es por los camiones sino por los que producen los remolques.
AMP