En la primera quincena de diciembre de 2019, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) subió 0.35 por ciento respecto a la quincena inmediata anterior; con ello la inflación anual se ubicó en 2.63 por ciento, el nivel más bajo desde la segunda quincena de julio de 2016 y por debajo del objetivo del Banco de México (Banxico) de 3 por ciento.
De acuerdo con la información publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el aumento quincenal de los precios se derivó de cotizaciones más altas en el transporte aéreo, servicios turísticos, cebolla, gas doméstico LP, servicios en loncherías y fondas, vivienda propia, gasolina Magna, nopales, carne de cerdo y servicios en restaurantes.
No obstante, lo anterior estuvo contrarrestado por precios más bajos en el jitomate, naranja, pollo, aguacate, computadoras, limón, chile serrano, televisores, otras verduras y legumbres y en el cine.
Al interior del INPC, el índice de precios subyacente (que excluye bienes y servicios más volátiles, como agropecuarios y energéticos) presentó un crecimiento de 0.36 por ciento quincenal y de 3.59 por ciento anual; mientras que el índice de precios no subyacente aumentó 0.31 por ciento quincenal y descendió 0.15 por ciento a tasa anual.
MRA