Durante la primera quincena de julio, los precios no dieron respiro, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró un aumento de 0.43 por ciento respecto al mes anterior; con este resultado, la inflación general anual fue de 8.16 por ciento, por encima de las expectativas del mercado, dio a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Los productos y servicios que aumentaron de precio y tuvieron mayor incidencia en la inflación fueron: huevo, papa, loncherías, fondas, torterías y taquerías, electricidad, servicios turísticos en paquete, restaurantes y similares, transporte aéreo, refrescos, cebolla y la naranja.
No obstante, lo anterior estuvo parcialmente contrarrestado por precios más bajos en: pollo, aguacate, uva, ropa para niñas, chile poblano, salas calabacitas, tenis, juguetes, juegos de mesa y pantalón de mujer.
Al interior del INCP, el índice de precios subyacente (excluye precios de bienes y servicios más volátiles, como agropecuarios y energéticos) tuvo un aumento de 0.34 por ciento mensual y de 7.56 por ciento anual.
Al interior del índice subyacente, a tasa mensual, los precios de las mercancías subieron 0.38por ciento y los de los servicios 0.30 por ciento.
Dentro del índice no subyacente, a tasa quincenal, los precios de los productos agropecuarios crecieron 1.22 por ciento y los de energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno, 0.23 por ciento.
De acuerdo con el Inegi, los estados que más recintieron la escalada de precios fueron Michoacán, Guanajuato, Chiapas, Sinaloa y Coahuila; mientras que los que se mantuvieron por debajo del promedio fueron Veracruz, Guanajuato, Ciudad de México, Mirella y Querétaro.
MRA