Un rebrote del covid-19, la dinámica del proceso de vacunación y el clima de inversión son los principales retos que enfrenta México y con respecto a este último punto, las iniciativas de reforma en la industria eléctrica y la de hidrocarburos inhiben nuevas inversiones, advirtió el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
“Los cambios propuestos (con ambas iniciativas) representan un retroceso claro en el desarrollo de un mercado competitivo, no garantizan mejores tarifas para las familias y las empresas, afectan la competitividad del país y afectarían negativamente el bienestar de los mexicanos en materia de salud y, por supuesto, impactan directamente en el atractivo de México como destino de inversión”, refirió el presidente Nacional del IMEF, Ángel García-Lascurain.
Puntualizó que en caso específico de la reforma a la Ley de Hidrocarburos, se incorporó la garantía de audiencia, pero sigue sin definirse el concepto de seguridad energética y económica nacional, lo que deja un enorme vacío que genera incertidumbre jurídica que impacta directamente el atractivo del país como destino de inversión.
El IMEF explicó que si bien México puede crecer este año a tasas por arriba de 4 por ciento, es una tasa muy baja con respecto a los ‘rebotes’ que tuvo la economía mexicana en recesiones anteriores (6.8 por ciento en 1996 y 5.1 por ciento en 2010).
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Argumentó que el principal motor de crecimiento es el sector externo y una parte relevante del crecimiento en 2021 proviene también del cambio en la forma de instrumentación de los semáforos epidemiológicos, pues hoy en día existe una lista más amplia de actividades clasificadas como esenciales, por lo que la dinámica económica sufrió las restricciones de movilidad impuestas en enero en menor medida que en abril y mayo del año pasado.
Sin embargo, los retos más relevantes que enfrenta la economía mexicana son la inoculación de vacunas, así como mitigar el probable rebrote que haya del covid-19 después del periodo vacacional de Semana Santa y mejorar el clima de inversión.
Este último se ha deteriorado significativamente por la serie de incesantes iniciativas legislativas antimercado que, aunque no se aprueben generan tensiones políticas excesivas y merman la confianza para invertir.
Asimismo, las consultas ciudadanas de dudosa representatividad que han echado para atrás proyectos de inversión privados, incluso en fase de construcción, y los acuerdos inconstitucionales para sepultar de facto la reforma energética de la administración anterior también han abonado al deterioro en el clima de inversión.
“El crecimiento de la inversión privada es condición necesaria para lograr una recuperación sostenible, máxime después de haber experimentado la recesión más profunda desde 1932”, aseguró el IMEF.
AMP