En la que será la última participación durante su gestión con la presencia de todos los países de la región, la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Alicia Bárcena, advirtió que a la inquietud que ha generado la pandemia del covid-19, que parece no tener fin, ahora se suma el conflicto entre Ucrania y Rusia.
“En un momento muy duro de nuestra humanidad, como decía Carlos Monsiváis, una de las mentes más lúcidas, ¡qué difícil es tener certezas en este tiempo que nos ha tocado! Porque a la inquietud de la larga pandemia que no tiene fin predecible, se ha sumado el horror de un conflicto, cuyos impactos son de una envergadura imposible de calcular”, señaló al cierre de la Quinta Reunión del Foro de los países de América Latina y el Caribe sobre el Desarrollo Sostenible.
La secretaria ejecutiva de la Cepal resaltó que en el foro se habló de la importancia de la educación pública, gratuita y de calidad en un espacio en el que acudieron mil 200 personas, con presencia de las “naciones unidas”, agencias de cooperación, bancos, organismos internacionales, sector privado, vicepresidentes, entre otros.
Cierre de un ciclo
De cara al cierre de su gestión en la Cepal, que concluye el próximo 31 de marzo, y entre lágrimas, agradeció el apoyo recibido durante 14 años al frente del organismo dependiente de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
“Cierro mi ciclo de 14 años en la Cepal que ha sido mi orgullo mayor, y como todo trayecto humano, cruzado de luces, de sombras ,de alegrías y no pocos quebrantos. A veces a la hora del balance nos calienta el corazón con profunda satisfacción y creo que hay muy pocos espacios en realidad como éste donde podemos decir, donde yo digo hoy: ¡hasta luego!. Así es que quiero decirles que ha sido para mí un orgullo estar aquí”, expresó Alicia Bárcena.
“Quiero decirles que ha sido tan grato estar aquí, tan, tan emocionante, quiero decirles que ha sido para mí un periodo extraordinario, ¡14 años!, y quiero decirles que aquella joven que yo fui hace muchos años tomó una precoz conciencia del orden injusto que teníamos, o que yo tenía ante mis ojos, y ahí se encendió la llama de la rebeldía. Es así, y la mujer que soy hoy, acompañada de mi compañero de vida y de mis hijos, agradece que esta llama siga encendida y tengo la esperanza de haber contagiado a otros y a otras de esta de esta rebeldía, hoy en el momento del adiós”, añadió.
AMP