Un juzgado de Madrid dictaminó que la carta de oferta de Santander a Andrea Orcel para convertirle en consejero delegado era un contrato vinculante, pero redujo la compensación del banquero italiano en 8 millones de euros (8.6 millones de dólares), a un máximo de 43.4 millones de euros (46.75 millones de dólares), de acuerdo con un documento judicial.
En una de las disputas salariales más destacadas de la banca, Orcel y el Santander acabaron en los tribunales después de que el mayor banco español abandonara sus planes de convertir al exbanquero de inversión de UBS en su consejero delegado en enero de 2019.
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La sentencia, fechada el 20 de enero, llega después de que Santander recurriera hace un año la orden de un tribunal inferior por la que debía pagarle 51.4 millones de euros, argumentando que la oferta de trabajo a Orcel no constituyó un contrato.
El tribunal le había concedido inicialmente una indemnización de 67.8 millones de euros antes de reducirla, ya que el juez aclaró posteriormente que Orcel no tenía derecho a una compensación fiscal como parte de una cláusula de rescisión.
En la nueva sentencia, los jueces redujeron de 10 millones de euros a 2 millones la cantidad concedida a Orcel por daños morales y de reputación, pero dejaron el resto de la indemnización sin cambios.
"Consideramos más proporcionado fijar la indemnización en la cantidad de dos millones de euros", dijo el juzgado en un documento de 30 páginas al que tuvo acceso inicialmente Reuters.
"A efectos de hacer una adecuada ponderación ajustada al caso, debemos situarnos en un espacio de análisis donde los intereses económicos, retribuciones, riesgos, responsabilidades, gastos, nivel de vida y afecciones personales de los contendientes fluyen en una escala propia", señaló.
El juzgado también tuvo en cuenta que la situación de desempleo de Orcel se prolongó durante un periodo de tiempo relativamente largo.
Santander recurrirá
Santander acogió con satisfacción la decisión del tribunal de reducir "significativamente" la indemnización, pero dijo que presentaría un recurso ante el Tribunal Supremo español, lo que retrasaría aún más cualquier resultado final.
Orcel afirmó en un comunicado enviado por correo electrónico que se alegra de que "la sentencia de hoy reivindique la verdad y la justicia al demostrar de forma incontrovertible por segunda vez ante un tribunal que hubo un incumplimiento fundamental del contrato por parte del Santander, como siempre hemos defendido".
La indemnización incluye 17 millones de euros en concepto de prima de contratación, 5.8 millones de euros por dos años de salario y la cantidad reducida de 2 millones de euros por daños a la reputación, más intereses.
Orcel también recibirá 18.6 millones de euros en acciones procedentes de una cláusula de recompra y vinculadas a objetivos a largo plazo, que según el Santander en un comunicado ascienden a unos 4 millones de euros en función de su valoración actual, lo que sitúa la indemnización total en unos 28.8 millones.
Santander dijo: "El señor Orcel tendrá que devolver ahora 8 millones de euros, más intereses".
El banco acaba de cumplir alrededor de una tercera parte de sus incentivos a largo plazo para altos ejecutivos de 2018 a 2020, dijo una fuente familiarizada con el asunto.
Los bancos en Europa y a nivel mundial tenían un margen limitado para seguir su política normal de dividendos, en un momento en que los bancos centrales establecieron límites para la remuneración de los accionistas durante parte de ese período debido a la pandemia del covid-19.
Orcel había renunciado a su puesto altamente remunerado en UBS antes de asumir su nuevo cargo en el Santander, renunciando a una considerable indemnización diferida.
En un principio había solicitado hasta 112 millones de euros por incumplimiento de contrato.
No obstante, una vez que se convirtió en consejero delegado del banco italiano UniCredit en 2021, modificó la demanda para reducir la reclamación.
AMP