La igualdad de género en los puestos de alta dirección en México presenta un rezago importante. Solo 18% de los empleos a nivel directivo es ocupado por una mujer, según el reporte Women in business 2016, de Grant Thornton. El promedio mundial es de 24%; sin embargo, en países como Rusia llega hasta 45%.
Si bien factores como los prejuicios de género, las obligaciones familiares y la maternidad limitan, en algunos casos, el potencial de las mujeres en el mundo de los negocios, cada vez existe más interés de su parte por consolidar sus habilidades de liderazgo; la preparación académica es una de ellas.
La participación de las mujeres en una Maestría de Administración de Negocios (MBA, por su sigla en inglés) y los programas académicos relacionados con la alta dirección aumentó durante los últimos tres años en México.
De acuerdo con la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), en el ciclo 2012-2013 se registraron 6,086 mujeres, es decir, 46.6% de la matrícula total de los posgrados enfocados al liderazgo de negocios.
Tres años después, en el ciclo 2015-2016, sumaron 7,448 mujeres, equivalente a 47.7% del padrón total de estudiantes. “Sin duda, las mujeres están ganando terreno en este tipo de especializaciones, aunque aún es un segmento donde los hombres son mayoría”, comenta Eric Porras, director del Programa MBA del EGADE Business School. En los últimos tres años, la matrícula del género femenino en el EGADE pasó de 25 a 30%, refiere.
A nivel internacional, en las universidades más prestigiosas, la participación de las mujeres en la matrícula de los MBA ronda entre 25 y 30%, según cifras de MBA Mujeres de México.
María Elisa Rojas, directora ejecutiva de Funed, institución que otorga financiamiento para estudiar una maestría en las universidades más reconocidas del mundo, asegura que el interés de las mujeres por cursar un posgrado relacionado con el liderazgo de negocios va en aumento.
En 1994, un año después de iniciar operaciones, 100% de los estudiantes becados por Funed fueron hombres. Para 2005, 38% de la matrícula ya estaba conformado por las mujeres; para 2015 esta participación subió a 45%, la más alta en 21 años.
“Actualmente tenemos una alianza con AT&T, en la cual buscamos apoyar mujeres ingenieras en telecomunicaciones. También contamos con apoyos adicionales para mujeres que deseen estudiar un programa de MBA. Estas iniciativas buscan fomentar su desarrollo y su empoderamiento”, comenta Rojas.
Posgrado, ¿sinónimo de mejor salario?
Ocho de cada 10 mexicanos ven en la maestría una herramienta para cumplir sus objetivos laborales. Específicamente, 45% considera que un posgrado es el pasaporte directo para ganar más dinero, de acuerdo con una encuesta de Trabajando.com. “Tener una MBA sí asegura un mejor futuro laboral”, asegura María Elisa Rojas de Funed.
De los becarios que esta institución ha apoyado, 73% consiguió empleo en menos de seis meses, 79% triplicó su ingreso anual y 78% mejoró su posición laboral.
Pero todo indica que, aun cuando es rentable estudiar un MBA, los beneficios económicos tienden a ser menores. Según el Ranking Global MBA que elabora el Financial Times, el incremento salarial de una persona con esta especialización está en declive, particularmente después de la crisis de 2008 que detonó en Estados Unidos.
En 2000, la remuneración de un profesionista con MBA aumentó, en promedio, 139% con respecto a su salario previo al posgrado. En 2008 creció 109%; sin embargo, en los últimos tres años el incremento fue menor a 100%.
El Networking es clave
Según una encuesta de Graduate Management Admission Council, una MBA genera mayor proyección en el mercado laboral. De las empresas encuestadas a nivel mundial, 96% considera que una escuela de negocios crea más valor a sus operaciones. Sin embargo, a pesar del interés que una MBA despierta entre los empresarios, estudiarla no basta. ¿Por qué?
Federico de Vicente, director en Page Personnel, da un dato revelador: 60% del éxito profesional de una persona que estudió una especialización obedece a los conocimientos obtenidos, 40% restante, a la red de relaciones que construyó, el llamado networking.
Ello implica que los beneficios de estudiar una MBA no son inmediatos: “su valor se genera a lo largo de la vida profesional y no al minuto de que uno la termina”, expresa.
¿En dónde estudio?
Las opciones para cursar una MBA o un posgrado de negocios son muchas, tanto en México como en el mundo. Para tomar la mejor decisión del plan de estudios que se requiere, lo primero que se debe tener claro es el objetivo.
También es importante tomar en cuenta que un programa de este nivel no es económico y que su costo dependerá de factores como el prestigio de la institución, la duración, si tiene un plan de intercambio con universidades extranjeras y su modalidad: presencial, online y semipresencial.
En México, una MBA tiene un costo de entre 300,000 y 860,000 pesos. En el extranjero se requieren hasta 200,000 dólares. “La decisión, además del objetivo, está en función de los recursos disponibles, de la disponibilidad de tiempo, la libertad para viajar, los planes profesionales y las metas personales”, comenta Federico de Vicente.
Un beneficio importante que da hacer una maestría en el extranjero es la red de contactos internacionales que se realizan, y que pueden ser claves en el desarrollo profesional, dice la directora ejecutiva de Funed.
México, buena opción
De acuerdo con la ANUIES, en el ciclo 2015-2016 se registró una matrícula en MBA y posgrados relacionados con la alta dirección de 15,606 estudiantes, 19% más que hace tres años. El número de egresados fue de 6,166 personas, de 250 universidades (algunas se duplican en los estados).
“México tiene universidades de prestigio para estudiar un MBA reconocido a nivel internacional. Nuestro país representa una plataforma para abrir una red global de contactos de diversas industrias, sectores y naciones”, comenta Eric Porras, director del Programa MBA del EGADE.
De acuerdo con el ranking de Expansión, las universidades que ofrecen los mejores MBA en México son: IPADE Business School, ITAM, EGADE Business School, Universidad Anáhuac, Universidad de las Américas y la UNAM.
El IPADE es la única institución considerada en el Global MBA 2016 que elabora el Financial Times, el cual lista las mejores MBA de tiempo completo en el mundo. De un listado de 98 universidades, se posicionó en el lugar 80.
Exportar más talento, un reto
Si bien en México existen instituciones reconocidas para estudiar una especialización, en el extranjero hay un número importante de universidades con alto reconocimiento listas para formar hombres y mujeres de negocios.
Insead, en Francia; Harvard, en Estados Unidos; London Business School, en Londres, y la Universidad de Pensilvania, en Estados Unidos, son solo algunos de los nombres que más figuran en el plano educativo.
No obstante, son pocos los estudiantes que cruzan las fronteras en busca de mejorar su futuro laboral.
De acuerdo con Funed, por cada 1,000 millones de dólares de Producto Interno Bruto, México solo envía a 1.5 jóvenes a estudiar una maestría presencial de tiempo completo en las universidades de mayor prestigio en el mundo. Naciones con las que competimos económicamente registran hasta 30. Nuestro país debe enviar a 5,000 estudiantes por año; actualmente son menos de 1,000.
Prefieren presencial
Aun cuando la vida diaria deja poco tiempo para realizar actividades adicionales, a la par de un avance acelerado de la tecnología, el grueso de la matrícula de los programas de una MBA es presencial, comenta el director de Page Personnel.
Si bien los planes de estudio semipresenciales y vía internet ganan terreno, la mayoría de los estudiantes toma clases de manera directa. La tendencia en los próximos años no parece cambiar.