Cuatro importantes instalaciones petrolíferas libias reanudaron su actividadtras haber sido cerradas por la fuerza durante tres semanas por orden de la Guardia de Instalaciones Petrolíferas (GIP), indicó el organismo.
"Los yacimientos petrolíferos del suroeste vuelven a estar operativos, al igual que las instalaciones de transporte de gas y crudo hacia las terminales del noroeste de Libia", declaró a la AFP un responsable de la GIP bajo condición de anonimato.
"El gobierno ha escuchado nuestras legítimas demandas, que son financieras y técnicas (...), porque llevamos años trabajando en condiciones difíciles", añadió.
Tras una reunión celebrada ayer en Trípoli con los representantes de la GIP en el suroeste del país, el jefe del gobierno de transición, Abdelhamid Dbeibah, "ordenó la reapertura inmediata de los campos de Al Sharara, Al Feel, Al Wafa y Al Hamada".
También encargó a una comisión que estudiara las "dificultades que están encontrando para llevar a cabo su misión", anunció el gobierno en un comunicado el lunes por la noche.
El 20 de diciembre, hombres afiliados a la GIP cerraron por la fuerza cuatro importantes yacimientos petrolíferos.
La medida provoco grandes pérdidas para este país inestable, que depende casi exclusivamente de los ingresos del petróleo y, en menor medida, del gas.
El cierre de estos campos estaba provocando pérdidas de "más de 300 mil barriles diarios", es decir, un tercio de la producción diaria del país, lamentó la Compañía Nacional de Petróleo (CNP).
Libia, que cuenta con las mayores reservas de petróleo de África, trata de salir de una década de caos desde la caída del régimen de Muamar Gadafi en 2011.
MRA