La libra esterlina caía nuevamente, pero recortaba alguna de sus pérdidas de la sesión, después de que el Banco de Inglaterra (BOE) anunció que intervendrá para apuntalar el mercado de bonos, mientras que el índice del dólar tocó un nuevo máximo de 20 años.
El Banco de Inglaterra dijo que compraría tantos bonos del Estado a largo plazo como fuera necesario hasta el 14 de octubre para estabilizar los mercados financieros, y añadió que pospondría el inicio de su programa de venta de gilts la próxima semana.
Mientras los mercados trataban de entender qué significaba esto para la libra, la moneda llegó a subir a 1.084 dólares, pero luego operaba con una baja de un 0.4 por ciento, a 1.0695 dólares.
"En realidad, están tratando de ayudar a la estructura del mercado de gilts (bonos), más que cualquier otra cosa... El hecho de que estén haciendo efectivamente (el alivio cuantitativo) de nuevo, mientras que también suben las tasas confunde la perspectiva de la política monetaria", dijo Brad Bechtel, jefe global de FX en Jefferies en Nueva York.
"También obliga a la libra a ser la válvula de escape de los gastos adicionales propuestos por el gobierno", agregó.
Los inversores también buscaron la seguridad del dólar en un contexto de incertidumbre política después de que las fugas en los gasoductos Nord Stream, entre Rusia y Europa, arrojaran gas al mar Báltico. El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, atribuyó las filtraciones a actos de sabotaje.
El índice dólar tocó un nuevo máximo de 20 años de 114.78, un avance que se veía favorecido por una subida igualmente implacable de los rendimientos de los bonos del Tesoro estadunidense.
Los retornos de la deuda estadunidense a 10 años subieron a 4 por ciento por primera vez desde 2010, llegando a alcanzar el 4.013 por ciento antes de ceder estas ganancias, al igual que los rendimientos de la deuda pública europea, tras el movimiento del Banco de Inglaterra.
El euro subía 0.02 por ciento, a 0.9595 dólares, tras haber caído a 0.9535.
srgs