'Lotería de la cuna' vincula el éxito de los padres con el de los hijos: CAF

El Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), precisó que la lotería de la cuna limita la movilidad social, el acceso a la educación y la posibilidad de tener una vida larga y saludable

América Latina y el Caribe es la región más desigual del mundo, a pesar de los progresos de los últimos años. | EFE
Silvia Rodríguez
Ciudad de México /

El Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) advirtió que, desde hace más de tres o cuatro décadas, la región perdió la capacidad de reducir las desigualdades; y que la llamada “lotería de la cuna” vincula el bienestar de los padres con el éxito que alcanzan los hijos, lo que limita las posibilidades de crecimiento y desarrollo de la población.

“La lotería de la cuna termina por vincular muy fuertemente el nivel de bienestar de los padres con el éxito que alcancen sus hijos. Para muchos latinoamericanos y caribeños las posibilidades de recibir una buena educación, de llegar a la universidad, tener una vida larga y saludable, de conseguir un empleo de calidad, de alcanzar un sueño de casa propia está fuertemente limitada por el hecho de haber nacido en un lugar pobre”, señaló el presidente ejecutivo de CAF, Sergio Díaz-Granados.

Durante el lanzamiento regional del “Reporte de Economía y Desarrollo 2022”, explicó que quizá desde hace siglos, América Latina y el Caribe es la región más desigual del mundo, a pesar de los progresos económicos y sociales de los últimos 20 años. Las cifras indican que una pequeña porción de la población logra retener gran parte de la riqueza que genera.

Desigualdades educativas

Así, apuntó el presidente de CAF, esas disparidades se extienden a las oportunidades educativas y laborales a las que acceden los latinoamericanos y los caribeños, ya que millones de niños y jóvenes de la región habitan en las zonas más rezagadas, con ausencia de la infraestructura y los servicios más fundamentales para la vida como lo son: agua saneamiento, energía y educación.

“Los datos incluyen a múltiples generaciones que han heredado desigualdades que persisten, grandes desafíos en educación, en calidad ,en pertinencia de la misma, en el acceso a la educación técnico profesional y, por supuesto, al cierre de brechas en la oferta educativa de calidad”, dijo.

Jóvenes que no estudian ni trabajan los más vulnerables a formar parte del crimen y el narcotráfico

“Adicionalmente, tenemos los temas de victimización. Uno de cada cinco latinoamericanos ha sido víctima de un robo en el último año, y una de las razones de esa violencia radica justamente en el crecimiento de la población joven que no estudia ni trabaja (jóvenes antes llamados ninis”), resaltó el titular de CAF.

Puntualizó que uno de cada cinco jóvenes en América Latina; es decir, 32 millones de personas que hoy no estudian ni trabajan, son jóvenes que están siendo presas más fáciles de actividades criminales hoy en día.

“La expansión del narcotráfico en toda la región está, además, debilitando la capacidad de la región para administrar justicia, para dar seguridad, para mantener instituciones a salvo. Va a ser muy difícil que la región alcance los objetivos de justicia, de aquí al 2030, con el crecimiento desbordado del narcotráfico que además encuentra una región pobre más vulnerada después del covid y con 32 millones de jóvenes sin esperanza”, comentó.

Movilidad social

Además, agregó Díaz-Granados, la movilidad social de la región es muy baja, lo cual representa un grave problema para la equidad y para otros aspectos del desarrollo; por ejemplo, cuando el precio individual depende demasiado de ese origen familiar, los incentivos al esfuerzo se debilitan y se distorsiona la asignación del talento humano, a la vez que se corre en las bases de la confianza entre ciudadanos e instituciones.

Asimismo, la oportunidad de movilidad está afectada por distintos tipos de riesgos, no son solamente los asociados con crisis macroeconómicas o los peligros del rezago tecnológico que puede generar destrucción de fuentes de empleo, o los desplazamientos en las cadenas globales de valor; sino que también está asociada a debilidades, como hacer frente a una pandemia, migraciones repentinas y rápidas, así como a riesgos que genera el cambio climático.

Sergio Díaz-Granados precisó que en la región 161 millones de personas, es decir, 2.5 de cada 10, aún no tiene acceso al agua potable y 431 millones de personas (7 de cada 10), no tienen acceso a saneamiento y las aguas son vertidas directamente a caños, ríos o al mar. Esto se convierte en un reto particularmente de igualdad de género, pues como el agua no está en el lugar donde se vive, la carga de buscarla cae desproporcionadamente sobre mujeres y niños, pero especialmente sobre niñas.

EVC

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.