La aerolínea alemana Lufthansa canceló sus vuelos y los de sus filiales a Teherán hasta el 20 de enero tras el siniestro del avión ucraniano al sur de Teherán con 176 personas a bordo.
El grupo de aerolíneas alemán justifica la medida por que no está "clara la seguridad del espacio aéreo en los alrededores del aeropuerto de Teherán".
Autoridades iraníes e internacionales realizan una valoración de la seguridad para el aeropuerto de Teherán y para todo el espacio aéreo iraníl, y Lufthansa decidirá si reinicia o no sus vuelos a la capital iraní cuando tenga información detallada.
La aerolínea alemana canceló su vuelo previsto este viernes desde Fráncfort a Teherán y el jueves un avión que ya había despegado desde el aeropuerto internacional de Fráncfort rumbo a Teherán, regresó tras una hora de viaje.
Canadá y Estados Unidos tienen indicios de que el vuelo 752 de Ukranian International Airlines (UIA), que cayó a tierra hace dos días cerca de Teherán con 176 personas a bordo sin que ninguna sobreviviera, pudo ser derribado accidentalmente por Irán con un misil, pero este país niega las especulaciones y dice que investiga la causa del accidente.
El miércoles Lufthansa canceló su vuelo a Teherán y dijo que no sobrevolará Irán e Irak como medida de precaución tras el ataque iraní con misiles a una base con tropas estadounidenses en Irak, pero el jueves quería volver a volar a la capital de Irán.
Las autoridades estadunidenses de seguridad de vuelo prohibieron el tráfico de viajes comerciales en parte de Oriente Medio por el aumento del riesgo de que se identifiquen mal algunos objetos voladores.
MRA