Con el propósito de apoyar el desarrollo de la producción, industria y mercado de cannabis en México, se anunció la creación del Consejo Mexicano de Cannabis y Cáñamo que presidirá Eda Myrna Martínez, quien solicitó al Poder Legislativo establecer, en conjunto con la sociedad civil y sector empresarial, reglas claras para esta industria.
En conferencia, el consejo refirió que es difícil obtener cifras sobre la industria ya que la autoridad no reconoce el número real del fenómeno de la cannabis en México, y al final se siembra para el trasiego, aunque existe información de otros países que revelan que en el territorio nacional se producen 80 mil toneladas anuales.
“Por eso es importante que el debate del Legislativo parta de la realidad en materia de la cannabis, tanto en la existencia de hectáreas productivas, como en la necesidad de la población de poderse atender por medio de esta molécula”, dijo el nuevo consejo.
Durante el próximo periodo ordinario de sesiones del Congreso de la Unión se reunirán expertos, organizaciones civiles y empresarios para la discusión sobre la regulación de la marihuana, en el que el consejo buscará un marco jurídico equitativo para su aprovechamiento, producción y comercialización.
Sobre si deberían de considerarse medidas proteccionistas contra las empresas extranjeras respecto a la naciente industria de la mariguana nacional, la presidenta del Consejo Mexicano de Cannabis y Cáñamo, dijo que una ‘tasación’ diferenciada entre las empresas nacionales y extranjeras puede aportar en algo, pero es mucho mejor y como primera medida su formalización para impactar en la base tributaría.
“La falta de regulación o la omisión legislativa está dando el nacimiento de mercados informales, quizá debemos de voltear más a este impacto que se está formando con la economía subterránea, en donde estamos hablando no de un comportamiento especulativo, sino que la misma base tributaría se está castigando en lugar de ampliarla”.
Martínez explicó que si existe una inversión del origen que sea dispuesta a la formalidad y a pagar los impuestos que se definan, ayudaría a poner más atención en abatir la economía subterránea e informal, que una diferenciación de un impuesto que tenga un impacto en la inversión y generación de empleos.
MRA