Reducir la concentración, aumentar la competencia y la inclusión financiera son las áreas de oportunidad para los bancos que podría traer una nueva reforma financiera al sistema mexicano, consideró la agencia calificadora Fitch Ratings.
En conferencia con medios Alejandro Tapia, director de instituciones financieras para México, indicó que a pesar de la reforma financiera de 2014 y los esfuerzos del gobierno federal en el Plan de Impulso Financiero anunciados en 2019, la baja bancarización caracteriza a México entre los países emergentes, por lo que una reforma podría incentivar a los bancos el otorgamiento del crédito; sin embargo, añadió que tienen la característica de otorgarlo prudencialmente.
“Existen varias iniciativas para elevar la inclusión financiera del 25 al 80 por ciento, no solo el otorgar más crédito, también en otros tipos de servicios financieros, creemos que es una iniciativa positiva que podría incentivar a los bancos a otorgar más créditos, pero los bancos mexicanos evalúan sus políticas de riesgo para entrar a distintos segmentos donde no necesariamente pueden entrar de manera agresiva”.
En este sentido, Verónica Chau, directora de instituciones financieras para América Latina de Fitch Ratings, indicó que otra de las áreas de oportunidad se encuentra en la competencia, al estar la banca concentrada en siete instituciones que cuentan con el 80 por ciento del crédito y fondeo pese a que se han otorgado aprobaciones de bancos de nicho, como resultado de la reforma anterior, que se ha traducido en más bancos sin que cambie el mapeo de los recursos.
“Es decir, si ha habido efectos de la reforma financiera anterior sin que cambie el mapeo de las concentraciones y entidades. Entonces, en términos de concentración, de participantes y de crédito son las mayores áreas de oportunidad en la que otra reforma financiera podría traer iniciativas que beneficiarán estos temas”, señaló.
Menor crecimiento del sector financiero este año
Fitch Ratings prevé para este año que los bancos mexicanos continúen con la tendencia de crecimiento moderado como consecuencia de un menor desarrollo económico, la reducción de tasas de interés y la inflación lo que influye en la capacidad de pago de los clientes.
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Alejandro Tapia señaló que el crecimiento de la economía tiene una correlación importante con el que podrían tener los bancos por el sentimiento que tienen los consumidores y los inversionistas para solicitar créditos o servicios financieros.
Por su parte, Verónica Chau, directora de instituciones financieras para América Latina estimó que para 2020 el crecimiento de crédito que otorgue la banca será de entre 5 y 8 por ciento.
“Cómo visión base estamos esperando entre el 5 y 8 por ciento de crecimiento para el crédito este año, pero la verdad con este último dato de PIB lo vemos más pegado al cinco por ciento el crecimiento del crédito que sigue creciendo por la baja inclusión financiera y por la venta cruzada que son las oportunidades que hay”, explicó.
En tanto, para las entidades financieras no bancarias, Fitch indicó que México tiene el Mercado más grande en cuanto a número y montos, por lo que mantiene una perspectiva estable a pesar de la baja penetración del crédito y el menor apetito de riesgo de la banca hacia ciertos segmentos.
lvm