La necesidad de contar con viviendas asequibles y respetuosas con el medio ambiente en México ha impulsado la búsqueda de alternativas sostenibles en el sector de la construcción. Gustavo Felipe Tomé Velázquez, experto en el sector inmobiliario, explica que los materiales sostenibles son clave para enfrentar los desafíos habitacionales en el país.
A través de opciones como el bambú, la madera reciclada y los bloques de tierra comprimida, es posible construir viviendas con una huella de carbono menor y un impacto ambiental significativamente reducido.
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“México enfrenta un déficit de viviendas importante, y aprovechar estos materiales sostenibles permite atender esa necesidad, además de reducir el impacto ambiental de cada construcción”, comenta Gustavo Felipe Tomé Velázquez, experto en el sector inmobiliario
De acuerdo con cifras de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), en México, el déficit habitacional supera los 8 millones de viviendas, mismo que se divide en un 20% correspondiente a la demanda de nuevos hogares, mientras que el restante 80% se enfoca en la necesidad de rehabilitación y ampliación de construcciones existentes.
Nuevas alternativas para la construcción
Tomé Velázquez asegura que los materiales sostenibles ofrecen beneficios únicos: el bambú, por ejemplo, es altamente resistente y crece rápidamente, lo que lo convierte en una alternativa eficiente y renovable. Por otro lado, la madera reciclada y los bloques de tierra comprimida, ambos materiales accesibles, se destacan por su durabilidad y bajo impacto ambiental.
Tomé Velázquez subraya que la autoconstrucción con materiales renovables y locales puede transformar las condiciones de vida en zonas rurales y urbanas marginadas.
"Estas técnicas permiten que familias de escasos recursos construyan sus propios hogares sin depender de materiales costosos y contaminantes”, afirma.
De acuerdo con datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el sector de edificios y construcción es responsable de cerca del 37% de las emisiones globales de dióxido de carbono, lo que hace que la adopción de prácticas más ecológicas sea una necesidad imperante.
Los beneficios de materiales sostenibles
"El bambú es un material de alto rendimiento y rápida regeneración; una sola hectárea de cultivo puede generar de manera sustentable alrededor de 1,000 metros cuadrados de material, suficiente para cubrir la demanda de edificación en diversas comunidades. Apostar por el bambú no solo reduce costos, sino que también ofrece una alternativa sólida para quienes buscan construir viviendas duraderas y ecológicas", explica el Tomé Velázquez
En cuanto al uso de madera reciclada, el experto asegura que está ganando terreno como alternativa sostenible, ya que aprovecha materiales previamente utilizados y reduce la demanda de tala de árboles nuevos.
“Las maderas duras, debido a su resistencia, pueden reutilizarse en estructuras de gran envergadura, mientras que maderas blandas se transforman comúnmente en MDF para carpintería. Incluso los restos que no son viables para otros procesos se destinan a la producción de biomasa en hornos industriales, maximizando así cada recurso y minimizando el desperdicio en el sector”, explica Gustavo Felipe Tomé Velázquez
Sobre los bloques comprimidos, elaborados con una mezcla de tierra, arena y arcilla que se prensan a alta presión sin necesidad de cocción, el experto explica que se reduce significativamente las emisiones de carbono comparado con materiales tradicionales como el ladrillo cocido y refiere que, además de ser económicos, tienen propiedades térmicas que mejoran el aislamiento en las viviendas, ayudando a mantener temperaturas estables y reduciendo el uso de energía.
“Invertir en materiales sostenibles es una solución para el presente y al mismo tiempo, una estrategia a largo plazo para garantizar que las futuras generaciones puedan tener un hogar sin comprometer al medio ambiente", concluye Tomé Velázquez.
HAGU