El interés creciente de los consumidores por adquirir alimentos balanceados y su intención de ser más cercanos a los procesos de estos ha impactado el mercado de productos orgánicos que debido a ello ha mostrado un crecimiento en su producción de cerca de 20 por ciento, señaló Guadalupe Latapí, fundadora de Aires de Campo, comercializador de productos orgánicos en México.
De acuerdo con Statista, hoy mercados como Estados Unidos, el principal impulsor del consumo de alimentos orgánicos a escala mundial, tienen una valuación en el segmento de más de 40 mil millones de euros. Aunque México no se encuentra dentro de los principales países impulsores del negocio, la tendencia sigue creciendo.
“Vimos un crecimiento muy lento al principio y ahora vemos un boom; cada vez hay un consumidor más consciente que quiere productos que sí les importa que haya detrás una responsabilidad social y económica hacia los productores del campo mexicano, para proteger el ecosistema y la responsabilidad de ofrecer alimentos saludables”, expuso la fundadora de Aires del Campo.
De acuerdo con la directiva, en algunas ocasiones los compradores del país están dispuestos a pagar entre 30 y haga 40 por ciento más por productos orgánicos.
“Hay un nicho de mercado que demanda una mejor transformación. En México todavía hay un reto enorme porque estamos retrasados en comparación a países de Europa y de Estados Unidos, pero hay potencial, lo que atrae a la industria alimentaria”, sostuvo la directiva.
Hoy Aires de Campo está enfocada principalmente en el desarrollo de huevo y pollo orgánico, aunque también trabaja en propuestas como maíz palomero, desarrollo de leches vegetales, pastas de leguminosas, granola, entre otras.
Latapí sostuvo que la implementación de la NOM-051 sobre etiquetado frontal para alimentos y bebidas procesados; así como los hábitos de consumo derivados de la pandemia de covid-19, han sido un aliciente para la industria.
“El consumidor cada vez está más consciente de que está dispuesta a pagar un sobreprecio por productos que protejan su salud. Las nuevas generaciones son los más exigentes y los más conscientes. El mundo está cambiando muy rápido, que todo consumo tiene una consecuencia y que al elegir un producto eres responsable de todo lo que viene detrás”, concluyó.
srgs