Mastercard aseguró que los consumidores buscan más métodos de pago alternativos al efectivo, ganando terreno las criptomonedas, la biometría y los que utilizan códigos QR.
En conferencia, Irina Valassi, vicepresidenta de productos digitales de MasterCard México y Centroamérica, explicó que la adopción de medios de pagos digitales se ha materializado tras la pandemia, toda vez que los clientes en comercios los consideran más limpios al no necesitar contacto y seguros al no tener que cargarlo en la bolsa.
A pesar de esto, la directiva detalló que aún faltan retos por vencer en temas de aceptación, implementación y regulaciones que aún limitan su uso, pero anticipó que los consumidores piden nuevas formas de pago como con biométricos, con códigos QR y también con criptomonedas, los cuales no descartó que operen en breve.
“Pagar con biometría, que puedas utilizar huellas, cara; pagar con códigos QR, que se han vuelto muy populares, pero que no tenemos tanta infraestructura para hacerlo y un tema adicional que llama mucho la atención que es pagar con criptomonedas, esos son los tres métodos que ahorita están por venir”.
La directiva indicó que dentro de las barreras se encuentra la falta de inclusión financiera y el desarrollo de infraestructura para la mayor aceptación de estas tendencias de pago que ya son recurrentes en otros países del mundo y que en otros, como es el caso de México, la informalidad limita su uso.
“Creemos que esta tendencia se va a mantener, esta evolución de los pagos digitales llegó para quedarse. Obviamente los que hoy ya están habilitados están ya aquí, pero tenemos otros métodos que están por venir y que todos los jugadores estamos trabajando para ellos. Los usuarios encuentran en estos métodos una seguridad que sale a raíz de la pandemia, por ejemplo el 70 por ciento de las personas creen que son métodos más limpios, entonces más confiables y una vez que lo adoptas y lo conoces y sabes que es seguro”, explicó Irina.
Finalmente, Valassi explicó que las inversiones de Mastercard y de los participantes del sistema financiero se han volcado en los últimos meses en temas de seguridad para darle fiabilidad a las transacciones y a los recursos de sus clientes, mismas que se han dirigido a rubros como “biometría pasiva”, enfocada a reconocer las formas de uso e inclinación que cada usuario tiene con su teléfono celular, contraseñas e incluso la presión que ejerce en la pantalla a fin de hacer más fluidos y seguros los pagos.
srgs