La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) mantuvo sin cambio las perspectivas de crecimiento para México, de 2.5 por ciento en 2018 y 2.8 en 2019, por lo que se mantienen las mismas previsiones dadas a conocer en marzo pasado.
De acuerdo con el documento Perspectivas Económicas 2018, si bien la OCDE estima que la economía mexicana crecerá, impulsada por el consumo privado y las exportaciones, está altamente expuesta a shocks externos como la incertidumbre relacionada con el Tratado de Libre Comercio (TLC).
Asimismo, existen riesgos relacionados con turbulencias en los mercados financieros por cambios en la política monetaria de Estados Unidos y tensiones en el entorno de negocios, que pueden conducir a volatilidad en el mercado cambiario, condiciones financieras más restrictivas y salida de capital.
No obstante, si las negociaciones del TLC concluyen favorablemente, la inversión privada, que ha estado limitada por este elemento, puede reactivarse y contribuir al crecimiento, y a eso se suma el impacto positivo por las actividades de reconstrucción relacionadas con los terremotos de 2017, así como las previsiones de niveles bajos de desempleo y de tendencia descendente de la inflación.
Las reformas estructurales ya tienen efectos visibles en México pero persisten desafíos, incluidos altos niveles de violencia y corrupción, pobreza, desigualdad, informalidad y el lento crecimiento de la productividad, dijo.
Para cosechar todos los beneficios de las reformas estructurales, dijo la OCDE, es necesario mantener su impulso para una implementación exitosa a escala nacional, complementada con una nueva ola de reformas para fortalecer el estado de derecho y mejorar la calidad institucional.
Por otra parte, el organismo destacó que la consolidación fiscal en el país ha llevado a que se registre el primer superávit primario desde 2008 y a una reducción en la relación deuda pública/producto interno bruto (PIB), pero prevé que si bien tal consolidación continuará, será a un ritmo más lento; no obstante, eso permitirá una recuperación de la inversión pública.