Pese a la promesa reiterada del presidente Andrés Manuel López Obrador de que la fractura hidráulica (fracking) para extracción de gas o petróleo no se usará en México, esta técnica no está prohibida en el país, sigue vigente en la ley e incluso con presupuesto asociado, señalan diversas asociaciones.
Reino Unido anunció el sábado pasado que terminaba su apoyo al fracking por la imposibilidad de predecir la probabilidad o magnitud de los sismos relacionados con sus operaciones y el gobierno le puso una moratoria hasta que se demuestre con pruebas convincentes que es seguro.
De acuerdo con la Alianza Mexicana contra el Fracking, la realidad es que esta técnica se realiza en México, y la Ley de Hidrocarburos permite la estimulación hidráulica regulada a través de lineamientos emitidos por la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) y la Comisión Nacional del Agua (Conagua), las cuales se encargan también de su supervisión.
El Centro de Análisis e Investigación Fundar ha explicado que no existe en la ASEA, Conagua, Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), Pemex, ni en las secretarías de Energía y del Medio Ambiente alguna acción implementada o contemplada desde el Poder Ejecutivo en línea con lo señalado por el Presidente, por lo que no existe un decreto de suspensión de dicha práctica.
La CNH explicó en agosto pasado que hasta ese momento 8 mil 457 pozos terrestres en México han tenido actividad de fracking, lo que representa 43 por ciento del total de los pozos terrestres que existen en el país.
En la actual administración Pemex presentó una solicitud para hacer fracking en su plan de trabajo para el campo Humapa, el cual fue aprobado por la CNH, pero al día siguiente el Presidente instruyó al director general de la petrolera, Octavio Romero Oropeza, cancelar dicha solicitud. Incluso la actual administración canceló una ronda de licitación para campos no convencionales y el Presidente ha reiterado que no se recurrirá a esta actividad para la extracción de hidrocarburos.
Sin embargo, Fundar señaló que en el análisis del Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2020 (PPEF 2020), entregado por el Ejecutivo a la Cámara de Diputados para su discusión y aprobación, destaca la asignación de 10 mil 8 millones de pesos para explotar gas y petróleo mediante fracking, lo que aumentará 58.4 por ciento en términos reales los recursos ya asignados para este fin en el presupuesto de 2019.
Actualmente hay tres iniciativas en diputados y tres más en el Senado encaminadas a la prohibición de esta técnica, pero Armando Guadiana, presidente de la comisión de energía del Senado, adelantó que no serán aprobadas iniciativas de prohibición de esta técnica.
EU a la par de Arabia Saudita
El fracking ha impulsado la capacidad de EU de producir tanto petróleo como Arabia Saudita o Rusia; el aceite de esquisto o shale oil puede producirse a costos de extracción más bajos que el petróleo tradicional, aunque el precio base puede variar enormemente, de acuerdo con la consultora Natixis Investment Managers.