Ante la emergencia sanitaria y la crisis económica que sobrevino, Nacional Monte de Piedad puso en marcha un programa para que estilistas, cocineros, tenderos, panaderos y trabajadores por cuenta propia de zonas rurales accedan a programas de financiamiento para reactivar la economía.
La inversión para esta convocatoria fue de 38 millones de pesos, en alianza con otras fundaciones; sin embargo, aún falta el financiamiento para nueve iniciativas más.
El objetivo es apoyar a los microempresarios, a través de organizaciones de la sociedad civil y cooperativas, con iniciativas que buscan impulsar la empleabilidad de este sector y ayudar a 11 mil personas de 21 entidades del país; 3 mil 300 dueños de negocios propios, mil 819 autoempleados en oficios y 5 mil 953 prestadores de servicios.
“Nuestros esfuerzos están enfocados en apoyar a la recuperación económica de trabajadores por cuenta propia y autoempleados, quienes son una población económica vulnerable en el país”, aseguró Marisol Fernández, directora de Inversión Social de la institución.
En entrevista con MILENIO, la directiva indicó se presentaron más de 300 proyectos de asociaciones y cooperativas, de los cuales fueron elegidos 57 que cumplen con todas las características, a los que se les dieron hasta 750 mil pesos.
Fernández explicó que los remanentes e intereses de los préstamos prendarios son destinados a este tipo de inversiones, a fin de apoyar a diferentes sectores de la población.
MRA