Netflix, el gigante del streaming, arrancó su plan de medidas enérgicas contra el uso compartido de contraseñas en Estados Unidos, alertando a los usuarios que sus cuentas no pueden compartirse gratuitamente con personas ajenas a sus hogares.
El pionero del streaming de video ha estado buscando nuevas formas de ganar dinero ante las señales de saturación del mercado, con esfuerzos que incluyen la represión de las contraseñas y un nuevo servicio con publicidad.
La empresa informó que estaba enviando correos electrónicos a los clientes que han estado compartiendo contraseñas para decirles que pueden añadir un miembro adicional fuera de sus hogares por 8 dólares al mes.
También pueden transferir el perfil de una persona para que el usuario conserve su historial de visitas y recomendaciones.
Las personas de un mismo hogar podrán seguir compartiendo la misma cuenta de Netflix y podrán utilizarla en varios dispositivos cuando viajen, explica la empresa en una entrada de su blog.
Netflix anunció el año pasado que iba a limitar el uso compartido de contraseñas y ya había probado varios enfoques en algunos mercados.
MRA