El endurecimiento de la política migratoria de México hacia los indocumentados centroamericanos, está “pegando” a la migración denominada documentada en Nuevo León (que incluye inversionistas, directivos, profesionistas, emprendedores, técnicos extranjeros junto con sus familias).
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Lo que empezó como un rezago en el trámite para obtener la visa de trabajo, hoy es una situación “permanente y hasta normal”, señaló María Elena Abraham, especialista en derecho migratorio del despacho legal Santamarina y Steta.
La experta dio a conocer que, previo al plan migratorio, los trámites para ser admitido en México y trabajar, eran de seis semanas, pero que ahora son hasta de seis meses o más.
“Lo anterior sin duda afecta a las empresas extranjeras que traen derrama económica al país. Estamos en la antesala de una recesión económica y con un menor flujo de inversión extranjera hacia nuestro país, ahora se suma el desencanto de las empresas foráneas por invertir en México”, añadió la especialista.
Incluso, dijo, ya hay alertas en los consulados del exterior donde se advierte al extranjero (empresario e inversionista) que la obtención de visa para trabajar es tardada. La abogada detalló que una vez que el gobierno mexicano destinó recurso humano (personal) y económico para atender a la migración indocumentada, descuidó la documentada (ésta deja divisas al país), lo que empezó como una situación temporal, pero que realmente se ha traducido en regular.
“Hay miles de solicitudes atoradas en las oficinas de (Instituto Nacional de) Migración de todo el país, pero en Nuevo León, que siempre se ha caracterizado por ser la que más recibe, el rezago es mayor.
“Lo que está ocurriendo es que todo el personal de Migración está atendiendo a los indocumentados centroamericanos y han dejado de hacerlo para el proceso de migración documentada, así que hay rezago considerable que ya está afectando a la inversión extranjera. Ya es un problema creciente que va a convertirse pronto en una pérdida de talento y divisas para México”, expresó Abraham.
María Elena Abraham comentó que en los últimos meses de 2019, el gobierno parecía que iba a resolver el problema del rezago, porque realmente se vio un desahogo de solicitudes en la migración documentada.
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Dio a conocer que, hasta el mes de diciembre de 2019, Nuevo León presentaba un rezago de solicitudes de un 85 por ciento. La especialista de la firma Santamarina y Steta afirmó que algunas empresas han desistido del trámite por lo tardado y porque el proyecto por el que venían a Nuevo León ya había concluido.
Se trata de migración documentada proveniente de Estados Unidos, Alemania, España, Canadá, Venezuela, Chile, Colombia, Brasil, Francia, Rusia e India, principalmente. Incluye desde ejecutivos y directivos, hasta técnicos especializados en ingeniería y tecnología.
La abogada destacó que como firma lo que han hecho es revisar caso por caso con las autoridades migratorias y solicitar a las empresas extranjeras cartas donde se expone la importancia de la inversión para el país o región de la República Mexicana.