Aunque la discusión sobre la desaparición de los aranceles impuestos por parte de Estados Unidos hacia México continúa a nivel bilateral, no hay certeza de que estos desaparezcan antes de que se firme el nuevo Tratado de Libre Comercio USMCA, aseguró Leopoldo Cedillo, director general de Metalsa.
El empresario explicó que actualmente hay un impacto importante en el precio de acero y aluminio, un 30 por ciento más caro que lo que se compra en Europa, y esto terminará afectando la competitividad del sector. Sin embargo, no cree que se logre antes de que el convenio de libre comercio se firme a nivel región.
"No hay certeza. Se comenta, pero no hay certeza de que se quiten antes. No es un tema de la Secretaría de Economía, es un tema bilateral de Estados Unidos y México... México tomó sus provisiones, se pusieron impuestos a ciertos productos agrícolas, ganaderos, el tema es que es cuestión de ellos dar marcha atrás", detalló Cedillo.
Puntualizó que el acero es un 30 por ciento más caro, y esta alza en los precios es algo que están absorbiendo las empresas, principalmente las armadoras automotrices. Pero finalmente, se transferirá a los consumidores finales, y se traducirá en la venta de vehículos que habrá.
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En cuanto a los acuerdos llegados en el USMCA, Cedillo consideró que existen importantes oportunidades para el sector, sobre todo los temas de integración, aunque argumentó que preocupa la regla que obliga a tener un salario mínimo de 16 dólares por hora. Algo que en México no es posible actualmente.
Sin embargo, no descartó que en el mediano o largo plazo, con el crecimiento adecuado, México y sus empresas puedan llegar a pagar estos salarios.
"No es opción en el corto plazo que los sueldos se incrementen en esa cantidad, no es viable. Lo que quisiéramos es que la economía crezca y los sueldos también, pero en un lapso de tres años no se ve como cerrar esa brecha de 4 dólares a 16 dólares. Debemos ir hacia allá", argumentó.