La Secretaría de Turismo (Sectur) nombró hoy a los municipios de Otumba y Jilopetec como nuevos Pueblos Mágicos del Estado de México.
El nombramiento lo realizó el titular de la Sectur, Miguel Torruco Marqués, al dar a conocer la lista de los nuevos 45 nuevos Pueblos Mágicos del país.
En el listado fueron integrados ambos municipios de la entidad mexiquense tras cumplir con los requerimientos solicitados para el fomento del turismo.
El primero localizado en la región de las Pirámides, donde se promueve la preservación del burro mexicano; y el segundo entre santuarios y zonas turísticas al poniente del Valle de México.
De acuerdo con el funcionario federal, su nombramiento se realizó tras un análisis, en el cual se determinó que cumplen con todos los requisitos para la promoción en llegada de viajeros nacionales e internacionales.
Recordó que al inicio de la administración federal se contaban con 121 Pueblos Mágicos, a los que se sumaron 11 más entre 2018 a la fecha, aunque este lunes se incorporan 45 más de 25 estados.
Tras el nombramiento, la próxima gobernadora de la entidad, Delfina Gómez, reconoció el nombramiento de los dos nuevos Pueblos Mágicos en el Estado de México e invitó a visitarlos.
“Me llena de alegría saber que la @SECTUR_mx nombró hoy a #Jilotepec y #Otumba como #PueblosMágicos, con los cuales ya contamos con 12 en el Estado de México. Les invito a conocer sus atractivos turísticos, y también a sus maravillosos habitantes que siempre nos reciben con tanto cariño”, indicó.
Otumba, protector del burro
El municipio de Otumba cuenta con el único santuario de Latinoamérica dedicado a la preservación y rescate del burro.
Localizado a poco más de una hora de la Ciudad de México, el municipio alberga el proyecto ecológico Burrolandia, donde habitan cerca de 100 ejemplares de burros rescatados en diferentes partes del país.
Burrolandia nació a partir de la preocupación de una asociación civil por la extinción del burro mexicano, que fue utilizado en el traslado de mercancías y de personas durante décadas.
Hasta la mitad del siglo pasado, el burro era usado habitualmente en el campo en las actividades agrícolas, sin embargo, la evolución técnica de la maquinaria y la pérdida de interés han llevado a que el burro mexicano esté en peligro de extinción.
De acuerdo con un reporte de Investigación y Desarrollo, en 1991 había alrededor de 1.5 millones de asnos en México, una cifra que ahora estaría alrededor de 300 mil ejemplares, según Burrolandia México.
Además, cuenta sitios históricos que datan del siglo XX como los Arcos del Padre Tembleque; la Casa de los Virreyes, así como el Centro Cultural Regional, donde nació el pintor Gonzalo Carrasco.
Jilopetec, sitio colonial y ecoturístico
Mientras que, en el municipio de Jilotepec, ubicado a 100 kilómetros de distancia de la Ciudad de México, los frailes Franciscanos del siglo XVI edificaron la iglesia de San Pedro y San Pablo, construcción remota a la época colonial, se encuentra en la cabecera municipal.
“Es una de las parroquias más antiguas construidas en México, como parte de un convento franciscano, del cual sólo la cruz atrial se conserva y perteneció al Camino Real de Tierra Adentro”, señalaron autoridades estatales.
También alberga a la iglesia de San Pedro y San Pablo que data del siglo XVI, así como la Plaza Manuel Ávila Camacho y la alameda central y la Casa de Cultura de la “Mtra. Amalia Márquez Padilla”.
Entre sus sitios emblemáticos destaca la Plaza Manuel Ávila Camacho; Ex Hacienda de Doxhicho; Iglesia “Santuario de la Virgen de la Piedrita”; Parque ecoturístico “Las Peñas” Dexcani Alto; Presa y Parque Danxhó; El Parque de los Sabinos en San Pablo Huantepec y La Taza en Ojo de Agua.
JLMR