La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) instó a México a revitalizar el crecimiento económico para mejorar las condiciones de la población, mediante una mejora del mercado laboral; disminución de las barreras de entrada y fomento a la competencia; fortalecimiento del sistema judicial y desarrollo del sistema educativo.
De acuerdo con el organismo internacional, la pandemia del covid-19 hizo evidente cómo los recientes aumentos en la pobreza, las desigualdades y las brechas de género agravan las antiguas dificultades para aumentar la inclusión.
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El organismo internacional refirió que el producto interno bruto (PIB) per cápita de México es 64 por ciento más bajo que el de los países de la OCDE, la productividad es 69 por ciento más baja y la tasa de desempleo es baja, pero estuvo aumentando lentamente desde la crisis de 2020.
Además, en México la desigualdad es mayor que en las economías más avanzadas, pues 20 por ciento de los hogares más pobres gana 5 por ciento del ingreso total, a lo que se suma que más de tres cuartas partes de la población están expuestas a niveles nocivos de contaminación atmosférica y las emisiones de carbono no han disminuido en los últimos años.
Mercado laboral
En este contexto, la OCDE propuso a México reducir la informalidad laboral y consolidar las medidas de protección social, para asegurar que la recuperación genere trabajos formales y que esto contribuya a la inclusión y a aumentar las rentas públicas a mediano plazo.
Esto mediante la simplificación de los sistemas fiscal y normativo para aligerar los costos de cumplimiento, así como fortalecer la aplicación de la ley al redirigir más recursos a los cuerpos de inspectores del ramo laboral; establecer un sistema de seguro de desempleo a nivel federal; y ampliar el acceso a guarderías asequibles y de buena calidad.
Asimismo, propuso impulsar la participación femenina en el mercado laboral, mediante el aumento de los derechos a permiso pagado reservados a los padres y el fortalecimiento de los programas para apoyar que más mujeres completen la educación secundaria.
Competencia y regulación
La OCDE también señaló que se deben reducir las barreras a la competencia porque esto impulsaría la inversión, a través del aseguramiento de la independencia y la adecuada dotación de las autoridades de competencia y los tribunales especializados; reducción de las adjudicaciones directas en las licitaciones públicas y consolidación del uso del sistema centralizados de contrataciones públicas federales.
Asimismo, México debe seguir aligerando las restricciones a la inversión extranjera directa (IED) en sectores clave para las etapas finales de la cadena de producción, como el transporte, la logística y la banca; y disminuir los trámites burocráticos a nivel local.
Gobernanza y sistema judicial.
En materia de gobernanza, el organismo que dirige José Ángel Gurría indicó que el país debe fortalecer la eficiencia del sistema judicial y las iniciativas anticorrupción, mediante el fomento a la capacitación y el fortalecimiento de las capacidades dentro del sistema de justicia penal.
Además, debe procurar la aplicación rápida y eficaz de la Política Nacional Anticorrupción; ampliar las iniciativas anticorrupción a nivel estatal; y reforzar la protección de los denunciantes.
Educación
Con respecto a la educación, la OCDE instó a México a seguir mejorando la infraestructura escolar y el material pedagógico, en particular en las escuelas desfavorecidas; evaluar el desempeño docente y garantizar que reciban una capacitación adecuada; y crear incentivos para atraer a buenos maestros y directores de escuela a planteles desfavorecidos.
Además, centrar el gasto en educación en la enseñanza preescolar, primaria y secundaria, y dirigirlo más a los barrios pobres y los alumnos desfavorecidos; y seguir ampliando la capacitación técnica.
lvm