La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) aseguró que los sistemas y habilidades no están listos en muchas de las regiones que la comprenden para las necesidades de readaptación que trae consigo la transición verde y otras megatendencias.
En un reporte, la OCDE reconoció que los sistemas de habilidades locales a menudo ya están luchando para mantenerse al día con los mercados laborales cambiantes. Las personas que más necesitan capacitación tienden a ser las menos propensas a obtenerla.
A pesar de la importancia de la transición verde en el discurso público, las políticas del mercado laboral y de habilidades para abordar el impacto de las políticas ambientales son limitadas.
La mayoría de los esfuerzos se centran en los trabajadores en riesgo de desplazamiento, en particular los empleados en la minería y la generación de energía a base de carbón. Incluso aquí, las regiones difieren en el grado de avance de la eliminación del carbón y las políticas asociadas.
“La transición verde ejercerá una mayor presión sobre los sistemas locales de habilidades y, si no se toman medidas, el logro de los objetivos climáticos puede verse obstaculizado por la escasez de habilidades verdes”, aseguró el organismo.
Al mismo tiempo, agregó que los beneficios y los costos de la transición verde se distribuyen de manera desigual entre los individuos. Hasta ahora, la transición verde ha estado sesgada por las habilidades, con trabajadores en tareas verdes que en su mayoría están altamente calificados y altamente educados.
Las regiones con alta concentración de trabajos contaminantes que aún no han desarrollado estrategias para apoyar a los trabajadores en riesgo de desplazamiento deberán intensificar sus esfuerzos.
Actuar rápido puede reducir el costo de la transición verde y minimizar el resentimiento social. También es importante reconocer que las políticas para apoyar a los trabajadores desplazados deberán extenderse a otros sectores afectados, como la manufactura y el transporte.
En cuanto a la preparación de los trabajadores, la OCDE consideró que, para capturar los beneficios de la transición verde, el progreso ha sido limitado. Las políticas ambientales que impulsan la demanda de habilidades verdes se desarrollaron en su mayoría al margen de las políticas de habilidades y del mercado laboral que impulsan su oferta.
Por último, la OCDE señaló que son necesarios canales de comunicación eficaces y nuevos métodos de impartición de formación adaptados a los desafíos a los que se enfrentan los grupos vulnerables para garantizar que la transición verde no deje más atrás a los trabajadores desfavorecidos.
SNGZ