A pesar de que el regreso a clases es una época de bonanza para las empresas de papelería en México, aún no es lo suficiente para recuperar lo que perdieron por culpa de la pandemia.
En entrevista con MILENIO, Diego Céspedes, presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Artículos Escolares y de Oficina (Anfaeo), reveló que además de que no prevén mayores ventas este año respecto a 2022, proyectan que se recuperarán del impacto del covid-19 hasta dentro de una década.
Destacó que 80 por ciento de las ventas de las papelerías en promedio dependen del sector escolar y durante la pandemia, al no ser considerado como actividad esencial, 20 por ciento del sector cerró permanentemente y las ventas se cayeron hasta 90 por ciento dependiendo el artículo.
A eso se le suma que 10 por ciento de los jóvenes dejó la escuela, siendo casi 3 millones de estudiantes menos “que no sé recuperarán en décadas”, por lo que prevén que el consumo a esa normalidad regresará en 10 años.
“Fue desastroso tanto para el sector papelero como para el industrial (...) afectó de la misma forma a las pequeñas que a las grandes papeleras porque el consumo prácticamente se acabó; sin embargo, los grandes mayoristas pudieron aguantar mejor, por lo que 20 por ciento de las papelerías pequeñas desapareció o tuvo que cambiar de giro”, añadió Céspedes.
En 2022, México tuvo su regreso a clases formales y como el inventario de útiles escolares en las casas era nulo, la derrama económica fue de 30 mil millones de pesos, misma que esperan para este año, provocado por el aumento de precios.
Diego Céspedes describió que, dividido por tipo de artículos, los destinados a las artes ya volvieron a los niveles previos a la pandemia, al igual que oficina, pero los de uso escolar no dado el impacto que tiene la inflación en el poder adquisitivo de las familias.
“El cierre de las cadenas de suministro elevó en 30 por ciento el costo de los artículos escolares entre 2020 a 2022, ahora vemos una inflación de 5 a 4 por ciento en 2023 (...) este año el incremento de precios es mínimo y en muchos casos hay deflación por el tipo de cambio y la baja de los fletes”, detalló.
El presidente de Anfaeo añadió que una de las mayores afectaciones que verán las papelerías es que las familias mexicanas están buscando artículos básicos de bajo costo, por lo que prevén un ticket promedio menor al registrado el año pasado.
Afirmó que las personas no buscan los artículos más novedosos, por lo que las papelerías tendrán que trabajar más en convencer a los consumidores de comprar cosas diferentes y con ello reducir sus inventarios.
“Las listas de útiles que salieron hace unos días, no fue en tiempo, y lo que esto provoca es un mayor consumo tardío y desordenado, cuando antes te las daban al salir, en junio, pero ahora como no supimos cuándo salieron los niños porque querían recuperar todo lo perdido (...) el consumo fuerte antes era un mes previo y 15 días después, ahora se va a dar a lo mejor 15 días antes y un mes después”, añadió.
En cuanto a si hay artículos que este año se dejarán de vender, Céspedes dijo que es muy pronto para sacar conclusiones, pero estiman afectaciones por el nuevo modelo educativo y libros de texto.
“Yo creo que será difícil las ventas de cuadernos cuadriculados y calculadoras cuando ya no hay libro de matemáticas, o cómo vas a comercializar diccionarios de español-inglés cuando no hay clases de inglés o cómo vender lápices bicolor sin evaluación a los alumnos, entonces seguro va a generar cambios en los hábitos de consumo”, aseveró.
AMP