Durante el segundo trimestre del año, Petróleos Mexicanos (Pemex) reportó una pérdida de 255 mil 922 millones de pesos, lo que contrasta con la ganancia de 25 mil 423 millones de pesos del mismo periodo del año pasado.
Esta es la mayor pérdida para la petrolera mexicana desde el primer trimestre de 2020, cuando se reportó una baja de 562 mil 251 millones de pesos.
La petrolera nacional detalló que los principales factores que contribuyeron a esta variación fueron la disminución en las ventas totales, un incremento en la pérdida cambiaria, una disminución en el rendimiento por instrumentos financieros derivados, un incremento en el costo de ventas, compensado con una disminución en el deterioro de activos fijos, y una disminución en los impuestos y derechos.
La empresa que dirige Octavio Romero Oropeza acumula en el año una pérdida de 251 mil 255 millones de pesos, en contraste con la utilidad del primer semestre del año pasado por 82 mil 159 millones de pesos.
De acuerdo con la información enviada a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), la empresa informó que obtuvo ingresos por 409 mil 528 millones de pesos, lo que significó una reducción de uno por ciento respecto a lo obtenido en similar periodo de 2023, cuando la empresa registró 414 mil 156 millones de pesos.
Esto se debió a una disminución de 16.1 por ciento en las ventas de exportación por menor volumen de crudo comercializado y la apreciación del peso contra el dólar, contrarrestado por un aumento de 12.5 por ciento en las ventas nacionales principalmente por mayores precios del crudo y productos petrolíferos.
El director general dijo respecto al flujo operativo (Ebitda) del segundo trimestre del año que se ubicó en 55.8 mil millones de pesos, una disminución de 37 mil millones de pesos, respecto al mismo periodo de 2023. “En el trimestre Pemex reportó una generación de valor de 18 por ciento, y el promedio de la industria de las empresas comparables es de 21 por ciento”.
Octavio Romero Oropeza añadió en llamada con inversionistas que estos seis años estuvieron llenos de retos y satisfacciones, ya que la condición en la que se encontró a la empresa en diciembre de 2018, exhibía un serio deterioro operativo y una frágil condición financiera.
“A lo largo de estos casi 6 seis años los asuntos de Pemex formaron parte relevante de la agenda del Presidente de la República, lo cual reconocemos y agradecemos. En un entorno de cambio de administración Pemex se encuentra lista para enfrentarse a nuevos retos pues con los resultados, toda la cadena de valor presenta cambios muy relevantes respecto a la condición en la que se recibió. Hoy tenemos una empresa productiva del Estado más fuerte, con mejor infraestructura y con perspectivas positivas”, finalizó el director general de Pemex.
MRA