La petrolera estatal mexicana Pemex y el equipo del multimillonario Carlos Slim están discutiendo el desarrollo de lo que sería el primer campo de gas natural en aguas profundas del país, buscando revivir un proyecto abandonado dos veces antes.
Las fuentes, ambas con conocimiento directo del asunto, dijeron que ejecutivos de empresas controladas por la familia Slim se reunieron ayer con Pemex para discutir el campo de gas del Golfo de México. Una de las fuentes dijo que habían acordado reunirse nuevamente.
El campo Lakach ha sido aclamado como una posible puerta de entrada a una nueva frontera de gas mexicano en aguas profundas y las fuentes dijeron que Pemex ha declarado que es una máxima prioridad encontrar un nuevo socio después de su último retiro a fines del año pasado.
Pemex quiere desarrollar el campo costa afuera mediante un contrato de servicios donde los socios financian proyectos por adelantado, un mecanismo utilizado antes de la apertura del sector energético del país durante las reformas, dijo una de las fuentes.
No se pudo determinar si las empresas de Pemex y Slim planean seguir adelante con el proyecto o si otras estarían involucradas. Las fuentes dijeron que Pemex también se había acercado a otras empresas.
Pemex no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. Un portavoz de Slim declinó hacer comentarios.
Slim, cuyo imperio se extiende desde las telecomunicaciones hasta la minería y el comercio minorista, ha estado aumentando su participación en el sector energético desde el año pasado con participaciones en campos de aguas poco profundas como Zama, Ichalkil y Pokoch.
Slim dijo el mes pasado que necesi ser socio con alguien con experiencia. Su imperio posee participaciones en varias empresas que podrían participar en el campo Lakach, incluidas las constructoras FCC e IDEAL.
Sin embargo, ambas fuentes dijeron que Pemex y Slim probablemente aún necesitarían otra empresa con experiencia en aguas profundas.
En noviembre Pemex y la compañía estadunidense de gas natural licuado New Fortress Energy rescindieron un acuerdo para desarrollar el campo porque las partes no pudieron llegar a un acuerdo sobre los términos, incluido el precio.
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha dicho que el campo Lakach podría ser clave para suministrar el gas que tanto necesita México y acercar al país a la autosuficiencia energética. Ubicado a unos 90 kilómetros del puerto de Veracruz en el Golfo, contiene aproximadamente 900 mil millones de pies cúbicos de gas.
Contratiempos del proyecto
Hasta ahora, Pemex ha gastado mil 400 millones de dólares en el desarrollo del campo. Los planes para producir gas en el campo se archivaron también en 2016, porque se consideró demasiado caro.
Funcionarios del regulador petrolero y de Pemex también han estado en desacuerdo sobre cómo desarrollar el campo.
Se revisaron cinco evaluaciones internas que el regulador realizó entre 2015 y 2022. En ellas, los funcionarios plantearon repetidamente preguntas sobre si el campo Lakach sería económicamente viable y técnicamente factible.
En un documento, fechado en octubre de 2022, funcionarios del regulador instaron a Pemex a presentar información adicional sobre "qué programas se implementarán para mitigar los riesgos y garantizar el éxito del proyecto".
Indicaron una falta de experiencia en gas en aguas profundas, así como estudios faltantes del campo y su infraestructura. También plantearon dudas sobre los costos ya hundidos y si el proyecto alguna vez generaría ganancias dados los bajos precios del gas.
En otro documento, fechado el mismo mes, los funcionarios advirtieron sobre la incertidumbre sobre el volumen de gas que realmente contiene el campo, incluidas evaluaciones contradictorias de las reservas probadas, y que los resultados de algunas pruebas se desviaron de lo que Pemex había proyectado.
PML