“Pizza! Pizza” es hoy un eslogan que la mayoría de los consumidores mexicanos y cuya historia comenzó a crecer en el país desde 2006. La frase que hace alusión a Little Caesars, una de las cadenas de pizzerías de mayor crecimiento en el país, ya es un referente del icónico negocio que le ha dado batalla importante a líderes de la industria, como Domino’s Pizza y Pizza Hut.
Fue en 1979 cuando los gigantes del sector vieron el surgimiento de una cadena que con sus atractivos precios, poco a poco fue ganándose la preferencia de muchos de los consumidores del manjar oriundo de Nápoles, Italia.
Ofertas tan llamativas, como la que recientemente lanzó de pizzas a sólo 10 pesos (a propósito del Día Mundial de la Pizza), han sumado a que su popularidad y preferencia entre los consumidores siga creciendo.
¿Cómo nació Little Caesars?
Little Caesars fue fundada en Estados Unidos por Mike y Marian Ilitch. quienes invirtieron los 10 mil dólares de ahorros que tenían y solicitaron un préstamo para el restaurante Garden City, el antecesor de lo que se convertiría en una de las principales marcas de pizzerías más populares a escala global.
La fórmula no requería muchos pasos, pero sí representaba una apuesta ambiciosa, considerando los costos de la industria: un negocio que ofreciera productos por debajo de los precios del mercado y con una entrega inmediata, lo que llamaron el modelo hot-n-ready. Lo cierto es que la propuesta dio buenos frutos y hoy la compañía tiene presencia en 27 países alrededor del mundo.
Con propuestas como dos pizzas al precio de una, y haciendo uso del modelo skateboard para comunicar sus promociones, fue que la empresa comenzó a crecer rápidamente en Estados Unidos y en Canadá, el primer mercado internacional de la firma.
¿Cuánto costaba la pizza de Little Caesars cuando llegó a México?
Fue en Ciudad Juárez, Chihuahua donde se inauguró la primera unidad de Little Caesars en México, que con una propuesta de pizza de pepperoni o queso, ofertaba sus productos a sólo 79 pesos, un precio que venía a darle mucha competencia a las firmas establecidas del sector.
Afuera de cada uno de los establecimientos de la marca, es común ver largas filas de gente esperando ser atendidos en la cadena; para el mercado mexicano, la alternativa que ofrecía era muy atractiva y así, el país se convirtió en su segundo mercado más prominente, después del estadunidense.
Con más de 500 sucursales en el país, la cadena ha acaparado el gusto de los paladares mexicanos. Para hacer frente a dicha demanda, en 2020 también lanzó el concepto Reserve and Ready, mediante el cual a través de una aplicación los compradores eligen la pizza de su preferencia y sólo acuden a las sucursales a recoger el pedido. A la par, mantiene su estrategia de delivery a través de terceros.
En 2019, Euromonitor International estimaba que el sector de pizzerías en el país superaba un valor por más de 5 mil millones de dólares. La industria se encontraba liderada por Domino’s Pizza, con un 5.1 por ciento de participación; seguida de Little Caesars, con 2 por ciento del mercado y Pizza Hut, con 1.9 por ciento de participación.
Esta es una de las comidas preferidas en el país; de hecho, en siete de cada 10 ocasiones en las que se pide comida a domicilio durante el fin de semana, se pide este alimento.
¿Cuánto vende Little Caesars?
La investigadora de mercados Statista, señala que en 2021 Little Caesars alcanzó ventas por 4.23 billones de dólares en Estados Unidos. Dicha cifra representa un incremento de 7 por ciento en relación a las cifras del año anterior.
¿Por qué las pizzas de Little Caesars son tan baratas?
Basado en un modelo de conveniencia, la marca de pizzerías se ha convertido en una manera rápida y económica de alimentarse para muchos.
Pero lograr estos precios, con los incrementos en los insumos que se utilizan para la preparación de este alimento, es todo un reto. De acuerdo con Scot Wienter, especialista en el sector, el queso representa alrededor de 40 por ciento de los costos del producto, indicó al medio estadunidense Mashed.
Así, una de las grandes claves de la empresa para tener pizzas baratas, el uso del ingrediente pre-rallado (que puede almacenarse por bastante tiempo), puede hacer que anticipen sus compras y con ello, no tener incrementos importantes comparados con las presiones inflacionarias.
Adicional a ello, la decisión de no tener un sistema propio de entrega a domicilio hace que los costos de operación sean menores, lo que permite que la marca pueda continuar ofreciendo precios bastante atractivos para los compradores.
CMOG