Los precios del petróleo bajaban levemente hoy, pero cotizaban cerca de su nivel más alto desde finales de abril y en camino de una cuarta semana consecutiva de ganancias, impulsados por las esperanzas de una fuerte demanda de combustible en el verano boreal y algunas preocupaciones sobre la oferta.
Los futuros del Brent restaban 22 centavos, o 0.25 por ciento, a 87.21 dólares el barril, y los del West Texas Intermediate en Estados Unidos (WTI) cedían 9 centavos, o 0.11 por ciento, a 83.79 dólares.
Con el mercado estadunidense cerrado ayer por la festividad del Día de la Independencia, las operaciones fueron escasas y no hubo liquidación para el WTI, pero los precios han subido esta semana por las fuertes expectativas de demanda estival en Estados Unidos.
"Los que han mantenido la fe en que la temporada de viajes acabaría llegando están brillando por su clarividencia y los numerosos llamados a un camino mucho mejor para los alcistas en el tercer trimestre parecen ser ciertos en estos momentos", dijo John Evans, analista petrolero de PVM.
La Administración de Información de Energía de Estados Unidos informó de una enorme reducción de inventarios de 12.2 millones de barriles la semana pasada, frente a las expectativas de los analistas de una reducción de 700 mil barriles.
Por el lado de la oferta, se informó que los productores de petróleo rusos Rosneft y Lukoil harán fuertes recortes a las exportaciones petroleras desde el puerto del mar Negro de Novorossiisk en julio.
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